Las furibundas hordas podemitas han lapidado durante estas últimas horas en Twitter al portavoz del PP en el Congreso, Rafael Hernando, «por machista».
Lo han hecho a raíz de su comentario al final del debate de la moción de censura, cuando prefirió no decir si había estado mejor Irene Montero que Pablo Iglesias para no sembrar discordia en «la relación».
“A Hernando se le escapó lo que creo que de verdad piensan aunque después intentó pedir perdón a su manera”https://t.co/890hQp1Yv9 pic.twitter.com/y3F2sb39Rs
— Las Mañanas Cuatro (@mananascuatro) 15 de junio de 2017
Pero para muchos es conveniente refrescarles la memoria para que les baje la fiebre feminista, que enturbia quizá su juicio. (FOTOS] Así marcan con latigazos a las mujeres los amigos iraníes de Podemos ¡porque van a fiestas ‘mixtas’!).
Cuéntanos más @pnique, que estamos muy interesados en eso del machismo.#MociondeCensura ??? pic.twitter.com/gwhpuX8j8g
— Mercedes Romón (@mromvi) 14 de junio de 2017
Y para ello, tal y como hace Ana Isabel Martín en ‘EsDiario’, nada mejor que recordarle a Irene Montero, a quien le da un asco tremendo el machismo y el «heteropatriarcado»: «Esta moción es feminismo», la facha con la que se presentaba -a veces entre camisas de manga corta- en HispanTV, donde la han prohibido enseñar los hombros. A ella y a todas las tertulianas, puesto que es la santa norma de la casa. (Las imágenes de los santurrones clérigos iraníes pillados de putas y metidos en faena).
La portavoz de Unidos Podemos en el Congreso ha participado muchas veces en Fort Apache, la tertulia política que Iglesias sigue dirigiendo y presentando en dicha televisión del régimen iraní desde finales de 2010 y por la que se embolsa unos 3.000 euros mensuales. (Pablo Iglesias seguirá cobrando 3.000 euros al mes de los sanguinarios ayatolás iraníes).
Las cinco imágenes adjuntas, correspondientes a cinco tertulias de dicho espacio grabadas en distintas épocas del año: febrero de 2015, julio de 2015, agosto de 2015, febrero de 2016 y diciembre de 2016, dan buena fe de con quien comulga y de las hostias en forma de críticas que se puede llevar por bocazas.
El régimen iraní no se caracteriza por ser precisamente feminista, ya que a la primera de cambio lapidan a las mujeres por los motivos más nimios, sin olvidar lo que hacen con los homosexuales en sus grúas.