Poco le ha durado la fiesta a Pedro Sánchez. Este 2 de julio de 2017 el diario El País le amarga el primer café de la mañana con una encuesta de Metroscopia en la que se anuncia un atasco o, mejor planteado, un leve retroceso del PSOE después de llevar algunos meses subiendo ligeramente en los sondeos.
Y es que no hace ni un mes, el 4 de junio de 2017, recién llegado de nuevo Sánchez a la secretaría general del PSOE, que las prospecciones electorales le daban uno de los mejores resultados desde la crisis del 1 de octubre de 2016.
La unión entre su victoria en las primarias a una recuperación lenta del PSOE entre los electores podían hacer de Ferraz una máquina imparable hasta las elecciones.
Pero han bastado unas semanas y el jugueteo con Podemos de cara a una posible segunda moción de censura a Mariano Rajoy para que la militancia socialista se hunda de nuevo en el desánimo, amén del impetuoso cambio de posición respecto al tratado de libre comercio con Canadá.
Según los datos de Metroscopia para El País, los socialistas obtendrían un apoyo estimado del 21,6%. Perderían poco más de un punto respecto al resultado que obtuvieron en el sondeo del 4 de junio de 2017.
Una de las razones de la desconfianza sobre Sánchez estriba en que el líder de Ferraz despierta un elevado entusiasmo entre los votantes de Podemos. Le aprueba un 52% de ellos. La cifra resulta aún más llamativa si se compara con los apoyos que suscita Sánchez entre los propios electores socialistas: un 64% le da su respaldo. Se trata de la valoración más baja obtenida por un líder político entre los suyos.
Por su parte, el Partido Popular retiene su primera posición, pero la corrupción sigue castigándole con una caída en apoyos que se sostiene en el tiempo. Su estimación de voto, según Metroscopia, es del 25,5%, siete puntos y medio por debajo del resultado que obtuvo en las últimas elecciones generales del 26-J.
Podemos recupera voto. Metroscopia le da una estimación del 20,6%, lo que supone 1,4 puntos más que en junio de 2017 y Ciudadanos parece ser el que mejor juega sus bazas. Su estimación de voto es del 18,8%, casi seis puntos por encima del resultado del 26-J.
