Zapatero e Iglesias tuvieron desde el nacimiento político del podemita, una innegable sintonía que se ha venido acrecentando además con el devenir de los acontecimientos.
Especialmente, las funciones del expresidente del Gobierno español al lado de Maduro para validar su penosa dictadura venezolana, han encandilado al jefe podemita, y ambos se deshacen en elogios hacia el otro.
Lo han hecho siempre en la distancia, y el pasado febrero de 2018, lo hicieron también compartiendo un acto en Bolivia en favor de Evo Morales.
El expresidente de Gobierno socialista y el líder de Podemos charlaron, compartieron confidencias, bromearon y se dieron palmadas en la espalda durante el evento, haciendo olvidar por unas horas la continua competición y rivalidad entre sus respectivos partidos. Y, por si fuera poco, los dos se repartieron elogios y aplausos. En una sintonía que sigue chocando entre dos representantes del PSOE y Podemos.
Así escribía Álvaro Carvajal en El Mundo, describiendo el último encuentro público entre ambos.
Ahora que Iglesias e Irene Montero van a ser padres de un par de churumbeles, es inevitable la broma en una imagen fabulosa.
