La independencia de Cataluña puede que sea una ruina, pero el independentismo es un gran negocio. La prueba es que las caras más emblemáticas del separatismo catalán tienen el riñon bien forrado, tanto que no dejan de invertir en negocios que van desde de la hostelería a las producciones televisivas.
Es el caso de Lluís Llach, cantautor y diputado de Junts pel Sí en el disuelto Parlament de Cataluña, el que dijo que sancionarían a los funcionarios que desoigan la ley de desconexión.
El cantautor está detrás de la fundación de La Bodega Vall Llach, creada en los años noventa del pasado siglo por el cantante y el notario Enric Costa en Porrera, uno de los nuevo pueblos que conforman la D.O.Q. Priorat.
Llach se alió con la empresaria y periodista Mariona Anglès, propietaria de la empresa Espais Telemàtics y esposa del también periodista Antoni Bassas, cerebro del ‘procés’, para abrir el restaurante El Tros-Vall Llach Barcelona. —Llach y Bassas abren el bar de vinos El Tros-Vall Llach—
A lo mejor al imbécil separata Lluís Llach le gusta que incitemos al boicot a su bodega «Celler Vall Llach», y a su bar «El Tros-Vall Llach»
— ن† OpinatorMadrid †ن (@OpinatorMadrid) 5 de noviembre de 2017
Cuenta El Periódico que allí sirven vinos del Priorat y el Montsant y donde se pretende llevar a Barcelona «un trocito del Priorat». El local combina gastronomía, vino y cultura y uno de sus atractivos es que dispone de un patio interior.
Es curioso que estos que se han hinchado los bolsillos gracias al ‘España nos roba’, como Llach, acaben de grandes empresarios independentistas.
Llach posee tres casas en propiedad, dos fincas rústicas, un local y otros inmuebles urbanos por un valor total de 569.000 euros, a los que hay que añadir, además, 136.000 euros en cuentas y depósitos, participaciones en sociedades por valor de casi 600.000 euros y 85.200 euros en acciones y fondos de inversión, además de un velero Nordwind de 11 metros de eslora. También declaró una deuda, por cierto, que asciende a 180.000 euros. —Lluís Llach no es tan independentista al jugarse su dinero: la web de su empresa sólo está en español—
Deje su opinión sobre el restaurante de Llach en Trip Advisor.