Pablo Iglesias anunció el 13 de enero de 2018, en su comparecencia en el Consejo Ciudadano de Podemos tras una ausencia de más de tres semanas, que a partir de ahora empezaría a estar presente en el primer plano mediático.
Al margen de su entrevista el 19 de enero de 2018 en ‘Hoy por Hoy’, en la Cadena SER, a Iglesias le sigue gustando más ir a los medios amigos, a los que no le hacen cuestiones excesivamente incómodas y donde puede soltar su perorata sin que nadie le frene en seco.
Este 25 de enero de 2018, eldiario.es saca la entrevista que le ha hecho al líder de Podemos y es un completo masaje donde, como quien no quiere la cosa, le mete un viaje a los medios de comunicación que no le bailan el agua.
Iglesias considera que su liderazgo no está en discusión, pero asegura que eso tienen que decirlo los demás:
Creo que no me corresponde responder a esa pregunta. No soy más que un servidor, un instrumento que una serie de compañeros han colocado para una misión muy difícil. La prueba de que esa misión es difícil es que incluso cuando en Vistalegre 2 confrontaron legítimamente dos proyectos uno de ellos no quiso disputar el liderazgo. Es una posición tan difícil que es complicado encontrar a alguien disponible para asumir ese rol. Ser secretario general de Podemos y presidente del grupo confederal tiene una serie de implicaciones que muy poquitos están dispuestos a asumir.
Dice que sólo se planteará el irse el día que ciertos medios de comunicación hablen bien de él:
Yo estoy dispuesto a seguir asumiéndolo pero en el momento en el que los compañeros digan que hay alguien que está dispuesto y puede hacerlo mejor, vosotros que me conocéis un poco sabéis que no me dolerá ni un poquito. Pero intuyo que mi papel es el que estoy jugando. Y de nuevo la prueba de que de momento tengo que ser yo son las baterías que coloca el adversario. El día en que determinados medios empiecen a hablar bien de mí, tendré que plantearme que quizá hace falta una persona distinta.
E insiste en que nadie le ha dicho nada en el partido sobre su liderazgo:
No. Nadie me ha llamado para decirme una cosas así. Pero si lo hicieran me parecería legítimo. Tiene que formar parte del funcionamiento normal. Supongo que el día que creáis que el director de vuestro periódico debería ser otro, se lo diréis. Es lo normal. O no.
Y volvió a vender lo que ya había dicho en 2014, que si los resultados electorales no eran buenos, igual se planteaba el dar un paso al costado:
El objetivo está en las próximas elecciones generales. Y luego habrá que evaluar el resultado. No es lo mismo que sea bueno y que no lo sea. Yo siempre he dicho que ocho años es un tiempo muy sensato y que por circunstancias inevitables se puede prorrogar dos o cuatro más. Pero más de ese tiempo no tiene ningún sentido.