Lo de la marranada del encarcelado licenciado en Historia, con especialidad en Historia Moderna y Contemporánea, y de paso doctor en Historia del Pensamiento Económico por la Universidad Autónoma de Barcelona, pasó algo desapercibido el 23 diciembre de 2012, fecha en que el periodista Arcadi Espada lo publicó en su blog de ‘El Mundo’. (El escandaloso vídeo de ‘Nada’ Colau haciéndose pasar por una eminente abogada).
Por entonces a Oriol Junqueras, -elegido a dedo por Puigcercós-, lo conocían poco más que en la panadería de la esquina de su casa, y tampoco tuvo tanta trascendencia años antes, según recuerda ‘Somatemps‘, cuando la historia salió a la palestra de la mano de ‘El diario de Juan Catalán‘: el actualmente encarcelado por golpista plagió descaradamente su tesis doctoral con el beneplácito de un tribunal de tesis:
«Lástima que su magna tesis adolezca de los mismos pecados de su maestro Simon Tarrés (laureado en 2003 con el premio Prat de la Riba del Institut d’Estudis Catalans, por un libro que, digamos, intertextualizó con tesis y trabajos de sus alumnos más aventajados».
Durante años, el hecho no ha dejado de correr los pasillos de la Facultad de Historia de la Universidad Autónoma de Barcelona, y viene ahora al pelo visto lo de Cifuentes y otras tropelías de parecido perfil. (El vídeo del macarrónico inglés de Iglesias que pone bajo sospecha su pretendido ‘máster’).
Y es que un díscolo miembro del tribunal que lo juzgó, dijo que su tesis tiene un número tal vez excesivo de páginas clavaditas a otras que se encuentran en el libro ‘Historia Política y Económica de Cataluña. Siglos XVI al XVIII’, de Jaime Carrera Pujal. (La lista de los currículums falsos del PSOE que deja como un tonto a Pedro Sánchez).
Lo más grave, si cabe, es la ignorancia supina que manifiesta en el uso de la terminología económica. Pretender «contribuir a la normalitat nacional de Catalunya» no debiera hacerse a costa de presentar a cuatro memorialistas del siglo XVII como precursores de las principales ideas del mercantilismo a escala europea,
«ni a costa de usar alegremente términos como teoría cuantitativa, devaluación o desconocer las más mínimas cuestiones de numismática histórica».
De traca, y de matrícula.
