Ha vuelto por sus fueros tras su baja por maternidad, hecha una fiera en una especie de circo donde no han faltado ni sus latigazos a la derecha ni sus lágrimas de cocodrilo ante un entregado auditorio repleto de mujeres. (El zasca tuitero a Irene Montero por estar callada como una puerta con ‘La Manada magrebí).
Lo ha hecho en Madrid bajo la bautizada carpa ‘La vida, en el centro’, donde han acudido en tropel colectivos de mujeres pensionistas, trabajadoras de Alcoa, taxistas, de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH), vecinas del poblado minero de La Camocha (Gijón) que luchan contra desahucios y, cómo no, féminas organizadas contra la violencia machista.
Entre todas, la han llevado en volandas al éxtasis político tras tragarse una rancia retahía de demagógicas arengas, que ha soltado tan solo una hora después de que PP y VOX anunciaran este miércoles 9 de enero de 2019 que han llegado a un acuerdo en Andalucía para apoyar la investidura del popular Juan Manuel Moreno Bonilla.
Irene Montero, la dos de Podemos, cogía así el testigo que su marido, Pablo Iglesias, había dejado un mes antes con su llamamiento a la movilización «antifascista» a todos los trabajadores, estudiantes, feministas y LGTBI y colectivos progresistas del país para frenar a la «extrema derecha» y proteger «la democracia» tras la irrupción del artido de Santiago Abascal en Andalucía.
Así, con quebrada voz y evidente nerviosismo, ha cargado sin contemplaciones contra la que ella llama los «trillizos reaccionarios», en clara alusión a Pablo Casado, Albert Rivera y Santiago Abascal, y ha hecho un llamamiento a sus «compañeras» a salir a la calle este 8 de marzo de forma más masiva que en 2018:
«Hay que ser más. Nos toca a las mujeres liderar la respuesta».
A su juicio, son las mujeres de este país las que deben «levantarse» y «luchar contra la vuelta al pasado»:
«Las mujeres sabemos mejor que nadie lo que es la derechización. Han estado en contra de que votásemos. Han estado en contra del divorcio. Han estado en contra del aborto».
Cuando la gente tiene miedo, la respuesta fácil es odiar al diferente, pero la gente hemos ganado las cosas enfrentándonos a los poderosos y no al diferente; cuando nos hemos unido y organizado, perdiendo el miedo y transformándolo en esperanza.@Irene_Montero_ #LaVidaEnElCentro pic.twitter.com/69vdOhwhbp
— PODEMOS (@ahorapodemos) 9 de enero de 2019
Ha recordado, entre sollozos los duros meses de lucha junto a sus hijos. «La esperanza puede vencer al más terrible de los miedos», y ha asegurado con respecto a estos que
«no van a tener miedo cuando crezcan a ir por la calle y que los violen o los maten»,
en alusión a la polémica en torno a las leyes de violencia de género.
La revolución de las mujeres es la fuerza más poderosa para construir el país nuevo que viene, un país que reparte sus cuidados, que reparte el trabajo, que cree que la gente tiene que tener derecho a trabajar para vivir, y no para sobrevivir. @Irene_Montero_ #LaVidaEnElCentro pic.twitter.com/REZA41JH9S
— Podemos Madrid (@podemosmad) 9 de enero de 2019
Y como colofón ha metido el miedo en el cuerpo a las presentes:
Todas las mujeres maltratadas, todas las que vuelven con miedo a casa porque no saben si les van a violar pero, sobre todo hoy, todas las mujeres andaluzas debéis saber que no estáis solas».
José María Rodríguez es redactor en Periodista Digital. @JMRMontero