Quedan 22 días para las elecciones municipales, autonómicas y europeas del 26 de mayo de 2019 y en Vox tienen claro que la mejor estrategia para derrotar o para hacer que el PSOE tenga un bajón tras la cita de las generales es ir precisamente contra el partido de Pedro Sánchez y contra sus posibles socios, separatistas, nacionalistas y podemitas –Abascal arremete contra la ‘derechita cobarde’: «Tuvieron 186 escaños y no supieron utilizarlos»-.
Por eso, en actos como los del Día de la Comunidad de Madrid, los candidatos a la alcaldía capitalina y a la Presidencia autonómica, Javier Ortega Smith y Rocío Monasterio, tuvieron claro el mensaje a transmitir –Ortega Smith, manual de hablar clarito: «Yo a los votantes proetarras no les tengo ningún respeto»-:
Otros que sigan con sus divisiones, con sus enfrentamientos. Hemos venido a enviar un mensaje de unidad y las batallas de los viejos partidos se las dejamos a ellos.
Tampoco Santiago Abascal es partidario de recrudecer la guerra con populares y naranjas y lanzaba esta afirmación –Uno de los chiringuitos que denuncia VOX en Andalucía: 3,3 millones para el ‘feminismo supremacista’-:
Siga el señor Casado equivocándose de enemigo. Nosotros a nuestras propuestas.
La estrategia en Vox es más que clara de cara a los comicios que se avecinan, ir a por el PSOE y a por sus posibles socios de Gobierno, podemitas y golpistas, para evitar precisamente que la derecha se desangre en una lucha sin sentido.
Y es que, tal y como pasó en Andalucía, muchos ayuntamientos y alguna que otra comunidad autónoma va a estar pendiente de repetir el acuerdo PP-Ciudadanos-Vox que tan buenos réditos está dando en la comunidad sureña –El oráculo Dragó, que lo clavó en Andalucía, incendia las redes con su nueva profecía: «VOX sacará 60 escaños»-.