Unas informaciones durante el mes de junio de 2021 colocaron en el punto de mira a Teodoro García Egea, diputado nacional del PP y mano derecha de Pablo Casado.
Detrás de todo ello estaba la periodista Alicia Gutiérrez, habitual tertuliana de extrema izquierda en programas de televisión, que quiso perjudicar al político del PP sacando una información sobre un familiar que habría recibido supuesto trato de favor en el hospital de Murcia.
El propio Egea y el Partido Popular, junto al presidente regional murciano, Fernando López Miras, presentaron entonces una denuncia penal contra la periodista y su medio, Infolibre, por un delito de revelación de secretos.
Fuentes del PP aseguraron que estas malas prácticas contra la familia de Egea tienen el único objetivo de hacer daño al número dos de Pablo Casado, y que la cosa tiene más trasfondo de lo que parece y ya se ha dado un paso esencial: llega a manos de la Fiscalía.
Este 7 de diciembre de 2021 La Verdad de Murcia publicaba que un juez ha abierto diligencias para saber lo ocurrido, en una maniobra podemita para valerse de los tribunales en su guerra particular contra el PP.
El informe que deja por los suelos a Podemos
Lo malo para los podemitas es que existe un informe interno del propio Servicio Murciano de Salud, que ya descartó este extremo confirmando que el suegro del secretario general del PP, Teodoro García, había seguido el proceso normal de un paciente con una patología de su gravedad.
Unidas Podemos desoyó este informe y ha seguido con su estrategia judicial para “manchar el honor del Presidente de Murcia”, como dice el comunicado del PPRM.
Unidas Podemos ha contado con la ayuda de un liberado sindical, vinculado al PSOE, que accedió a datos personales de la historia clínica del paciente sin conocimiento ni autorización, lo que le puede acarrear una condena por intromisión ilegítima.
