La mayoría absoluta está hecha.
Si ninguna de las partes implicadas se dedica a guerras estériles, PP y VOX conseguirán desbancar a Pedro Sánchez de La Moncloa.
Este 24 de diciembre de 2021, a modo de aguinaldo navideño, la encuesta de intención de voto que publica El Debate deja al bloque de centro derecha con el mando del Gobierno de España en su mano.
Ambas fuerzas, sumando también lo que saque Ciudadanos, aglutinan cerca del 50% de las papeletas electorales, muy por encima de la coalición socialcomunista formada por PSOE y Unidas Podemos.
La vitalidad de los partidos del ala conservadora viene reforzada por el partido de Santiago Abascal, que es el único que crece, prácticamente medio punto en apenas dos semanas.
De un 16,05% obtenido en el sondeo posterior al puente de la Constitución y de la Purísima, VOX alcanza un 16,45%.
El PP va viendo frenada su caída por la guerra entre Pablo Casado e Isabel Díaz Ayuso, pero aún así se deja algún pelo en la gatera.
La formación de Génova 13 se queda en un 27,83% de intención de voto, lo que implica haber perdido un 0,09% respecto al anterior análisis demoscópico.
Ambos partidos están expectantes a lo que saque la fuerza de Inés Arrimadas, cada vez más enflaquecida en las expectativas electorales.
Una vez más pierde apoyos y pasa del 3,24% al 3,20%, lo que acerca más al partido naranja a esa posibilidad de quedarse como fuerza extraparlamentaria.
Por la orilla izquierda, el PSOE refleja prácticamente el mismo porcentaje en la intención de voto con un 25,59%. Hace 15 días sumaba un 25,60%. Pero desde luego no alcanza la expectativa de votos que CIS tras CIS ‘vaticina’ José Félix Tezanos.
Quien sí sufre desgaste demoscópico es Unidas Podemos.
De un 10,87% pasa a un 10,54%, es decir un 0,33% que pierde en medio mes.
Al partido morado le sigue pesando la nebulosa que se ha instalado en su cúpula porque su electorado desconoce si será Ione Belarra la candidata o se fiará la suerte del partido a Yolanda Díaz, si bien esta tampoco es capaz de concitar nuevos apoyos.
Otra fuerza que ha acabado por ser víctima del ‘efecto gaseosa’ es Más País.
El partido de Íñigo Errejón, que llegó a acariciar la posibilidad de calcar a nivel de España lo sucedido en la Asamblea de Madrid, sorpassando a los podemitas, pierde respaldos. Se deja 0,12% en intención de voto hasta situarse en el 3,22% de las papeletas.