Anda ‘moscatel’ en las últimas semanas.
Y razones no le faltan, la verdad sea dicha.
El equipo de la podemita no digiere que quien se ha marchado dando un portazo de la política pretenda tutelar ahora las acciones y los discursos de la ministra.
De hecho, hay una frase que retumba por las cuatro paredes del despacho de la propia Díaz y de quienes son sus más directos colaboradores:
¿Pero no dejó Pablo Iglesias la política?
Existe preocupación por el papel que está adquiriendo el fundador de Unidas Podemos porque, aunque es cierto dio la espantada tras las elecciones del 4-M en Madrid, Iglesias no para a la hora de ‘recomendar’ o, directamente, intentar marcar a Díaz las líneas a seguir.
Precisamente la situación prebélica en Ucrania es lo que ha desatado la guerra a navajazos entre los dos políticos.
Pese a que la vicepresidenta segunda del Ejecutivo Sánchez está como sucesora parlamentaria y gubernamental de Iglesias por el dedazo de este, a la política gallega no le gustan las tutelas.
Por eso, cuando el fundador de la formación podemita vio fuera de juego a Díaz por mor del coronavirus dijo esto sobre el papel que España tendría que representar en el conflicto entre Rusia y Ucrania:
¿Qué tenemos que ganar los europeos con la ampliación de la OTAN en Ucrania? Nuestro país quiere paz y ya no se deja engañar con el cuento de las guerras por la democracia.
Inapelable @PabloIglesias Algunos lo van a tener muy difícil para vendernos esta guerra pic.twitter.com/ssNamDvaUk— Javier Sánchez Serna (@J_Sanchez_Serna) January 22, 2022
“Defender la paz supone entender que Europa, más allá de ideologías, necesita una política exterior propia que le garantice una vecindad razonable con Rusia. De ello depende la estabilidad económica y energética de la propia Unión”
Escribo en @ctxt_es ??https://t.co/CB4nYZvQKa
— Pablo Iglesias ? (@PabloIglesias) January 20, 2022
A Europa, por razones económicas y geoestratégicas, le conviene rebajar la tensión entre EEUU y Rusia. El furor pro-USA acabó con Aznar y hoy sería una gran torpeza de la parte socialista del Gobierno enfrentarse a todos sus socios y montar el “partido de la guerra” con el PP pic.twitter.com/Kyu2JHPsFY
— Pablo Iglesias ? (@PabloIglesias) January 20, 2022
La vicepresidenta segunda, en cuanto pudo estar de nuevo en liza tras superar el contagio, salió a replicar a Pablo Iglesias y respaldar al presidente del Gobierno:
La voz del Gobierno es la del presidente Pedro Sánchez.
El problema es que ya se había quedado más sola que la una viendo como notables podemitas como Irene Montero, Ione Belarra o Pablo Echenique se posicionaban del lado del fundador morado.