En el inicio de la Semana Santa, el viacrucis es para Podemos y como consecuencia de su desplome, también para Pedro Sánchez.
Y es que, aunque los podemitas chirríen por la manipulación del CIS de Tezanos, lo cierto es que cada día se desinflan.
Si bien es cierto que el Centro de Investigaciones Sociológicas que dirige el socialista José Félix Tezanos ya no cuenta con ningún tipo de credibilidad porque es reconocida abiertamente como una herramienta propagandística del presidente de Gobierno, lo cierto es que los morados se han desinflado desde que conforman parte del Ejecutivo Frankenstein.
Puede ser que a la gente no le siente bien que 750 delincuentes sexuales se hayan visto beneficiados por la ley del sí es sí, sin siquiera una disculpa de los responsables de la chapuza; o que se inmiscuyan en la vida sexual de las personas; o el que denuncien que los semáforos discriminan, entre otras muchas cosas. No se puede saber a ciencia cierta.
Lo que sí se puede apreciar son las tendencias de las distintas encuestas que recoge el barómetro de encuestas que publica mensualmente El Debate. Este análisis demoscópico, que recoge una media ponderada de las 13 últimas encuestas, sin tomar en cuenta el CIS de Tezanos por su marcado sesgo, arroja que los socios de Pedro Sánchez caen por primera vez del 10% en intención de voto, a causa de sus desmanes, y caen al 9,99%. En el 2019, cuando accedieron al poder, contaban con un 13%.
Lo cierto es que las malas noticias se le acumulan a los de Ione Belarra e Irene Montero, que ven como mañana Yolanda Díaz, muy posiblemente, anunciará su candidatura a la presidencia sin haber ‘doblado el brazo’ a sus exigencias. Esta batalla intestina de la extrema izquierda también sería una de las causas de la caída en la intención de voto.
La otra tendencia que se aprecia en las distintas encuestas además del derrumbe de Podemos, es VOX haciendo pedazos –de nuevo- los pronósticos que auguraban su caída. Esta vez a cuenta de la moción de censura y su apuesta por Ramón Tamames.
El partido de Santiago Abascal en lugar de caer, como auspiciaban muchos ‘analistas’ políticos sube casi dos décimas, del 14,80 % de marzo al 14,97 %, de acuerdo al barómetro.
El Partido Popular encabezado por Alberto Núñez Feijóo, sigue con su buen momento, al subir una décima y media, del 31,41% al 31,56%. Una buena noticia de cara al proceso electoral del próximo 28 de mayo y que puede ser una auténtica sentencia para los socialistas. Los populares mantienen la misma distancia sobre el PSOE 5,68% desde el último mes del año pasado.
Pese a ello, el barómetro señala que los socialistas crecen al mismo ritmo que los populares, manteniendo la diferencia de cinco puntos y medio con la que inició marzo y suben del 25,88% al 25,73%.
En cuanto al ‘espacio a la izquierda del PSOE’ como algunos medios llaman eufemísticamente a la extrema izquierda, MásPaís, el ‘Podemos bien’ de Íñigo Errejón y elemento clave en el proyecto de Yolanda Díaz, también cae levemente, del 2,65% al 2,57%.
Por bloques, la sumatoria de PSOE y Unidas Podemos queda en el 35,87% mientras que la unión de PP y VOX arroja el 46,53%. La diferencia de más de 10 puntos solo podría ser salvada con un Frankenstein 2.0 que incluya además de los independentistas de ERC y Bildu, al PNV y otras fuerzas minoritarias que minarían todavía más, la independencia del PSOE.
Por su parte, pese a que el PP se ha alejado de VOX, asegurando que tiene «su propio camino», es más que seguro que la vía hacia Moncloa, pase por Bambú de una u otra forma. Salvo que se llegue a un acuerdo de Gobierno en minoría, parece que los de Feijóo y Abascal están ‘condenados’ a entenderse para formar Gobierno.