Antonio Maestre volvió a intentar defender lo indefendible.
El periodista de izquierdas recibió una somanta de palos por buscar blanquear la presencia de Gioconda Belli, peligrosa sandinista, en el acto de Yolanda Díaz para la presentación de ‘Sumar’.
“La participación de Gioconda Belli en el acto de presentación de Yolanda Díaz desactiva una de las dianas originarias contra Podemos por afinidad a regímenes en Latinoamérica. Que una perseguida por el régimen de Daniel Ortega en Nicaragua dé su apoyo a Yolanda Díaz anula esa crítica”, indicó en redes.
Sin embargo, Maestre pasó por alto que Belli es una de las sandinistas que ayudó en la implementación del régimen de Nicaragua.
Un ‘detallito’ que le recordó Hermann Tertsch, eurodiputado de VOX, vapuleándole a través de las redes sociales.
“¡Qué gracioso Toño, el chequista del sofisma! Dice que la compañía de la nica roja Belli, que tanto ayudó a crear el infierno comunista en Nicaragua y quiere crearlo ahora en España, pero peleada con su amo Ortega, hace menos cercana al narcocomunismo a Yoli, célebre por sus baboseos por Castro y Chávez y el Narco Foro Sao Paulo y Grupo/Cártel de Puebla”.
¡Qué gracioso Toño, el chequista del sofisma!
Dice que la compañía de la nica roja Belli, que tanto ayudó a crear el infierno comunista en Nicaragua y quiere crearlo ahora en España, pero peleada con su amo Ortega, hace menos cercana al narcocomunismo a Yoli, célebre por sus… pic.twitter.com/CbzIKfBQpu— Hermann Tertsch (@hermanntertsch) April 3, 2023
La ‘amiguita’ de Díaz
Es importante recordar que, durante la Revolución Nicaragüense protagonizada por el FSLN, Belli fue una de las principales gestoras del movimiento hasta su victoria el 19 de julio de 1979 cuando derrocaron a Somoza. A partir de ese momento, pasó a ocupar varios cargos dentro del Gobierno sandinista. En 1984, fue representante sandinista ante el Consejo Nacional de Partidos Políticos y portavoz del FSLN en la campaña electoral de ese año.
Durante los años en que formó parte del régimen, se cometieron ejecuciones extrajudiciales y se encarceló a todo aquel que hubiese sido somocista u opositor al sandinismo. Miles de personas huyeron del país por razones políticas y económicas.
Entre los crímenes del sandinismo que han sido denunciados por diferentes organismos internacionales destacan la Navidad Roja y las fosas comunes de La Pólvora, ambos cometidos en 1983.
No fue hasta 1994, al perder sus funciones dentro del partido –el sandinismo perdió las elecciones en 1990 y no volvió al poder hasta el año 2006–, que Belli presentó su renuncia “por desavenencias con el rumbo” del Gobierno de Ortega.
Irónicamente, se trata de la misma comunista que también ha sido defensora de Fidel Castro y Hugo Chávez, llegando a lanzar mensajes como: “Fidel fue un latinoamericano excepcional que transformó y llenó de sueños a toda una generación. Esos sueños valieron la pena. Mis respetos” o “Murió Chávez y Venezuela se queda sin hombre fuerte y desconcertada”.
