Un ex alto cargo de la Policía Metropolitana, que rechazó la posibilidad de dirigir la investigación de la desaparición de la niña británica Madeleine McCann, considera que encontrarla ahora es «casi imposible». El exoficial Colin Sutton cree que su cuerpo podría estar enterrado en uno de los 600 antiguos pozos de Praia da Luz (Portugal), donde la niña desapareció hace 11 años, recode The Daily Mail.
A pesar de que la investigación de su desaparición recibió, según medios británcios, a finales de marzo 210.00 dólares de fondos por otros 6 meses, Sutton aseveró durante un documental de Channel 7 que la búsqueda de Madeleine es una «tarea ingrata», según recoge RT.
«Es casi imposible sin una información específica que te permita concentrarte en un área específica», enfatizó el detective, y explicó que se trata de «una gran zona de poca población, matorrales y pozos antiguos».
De acuerdo con Sutton, «sería muy fácil esconder algo ahí y estar seguro de que no se encontraría». El oficial agregó que la única esperanza era que alguien que supiera lo que le sucedió a Madeleine, finalmente revelara la verdad.
En la operación gubernamental Operation Grange, lanzada en mayo de 2011 para encontrar a Maddie, ya se han gastado más de 15 millones de dólares. Si algún día la suspenden, los McCann han prometido continuar la búsqueda ellos mismos.
El fondo Find Maddie («Encontrar a Maddie», en inglés), que se compone de donaciones públicas y ganancias del libro escrito por la madre de la niña, ha recaudado en el último año fiscal más de 1 millón de dólares para la contratación de investigadores privados.
Madeleine desapareció el 3 de mayo de 2007 de un hotel de Praia da Luz. La menor estaba a punto de cumplir 4 años y sus padres, Kate y Gerry McCann, ―que habían salido a cenar― la habían dejado durmiendo junto a sus dos hermanos en la habitación del hotel donde se alojaban.
La pareja nunca perdió las esperanzas de que Madeleine pudiera ser encontrada con vida. Ahora la niña tendría casi 15 años.
