A lo largo de estos años, Bocos ha trabajado, sobre todo, en la formación y en la animación y gobierno de la vida consagrada, amén de prestar servicios en la educación
El sábado 26 de enero, a las seis y media de la tarde, el cardenal Aquilino Bocos Merino, claretiano, tomará posesión de la diaconía que le fue asignada por el Papa Francisco al recibir, el pasado 28 de junio, el capelo cardenalicio.
Se trata de la diaconía de la céntrica iglesia romana de Santa Lucía del Gonfalone (Via dei Banchi Vecchi, 12).
El cardenal Aquilino Bocos es de origen vallisoletano. Nació el 17 de mayo de 1938. Es misionero claretiano desde el 15 de agosto de 1956 y sacerdote desde el 23 de mayo de 1963.
A lo largo de estos años, ha trabajado, sobre todo, en la formación y en la animación y gobierno de la vida consagrada, amén de prestar servicios en la educación.
De 1991 a 2003 fue superior general de los Misioneros Claretianos.
Nombrado cardenal por el Papa Francisco el domingo 20 de mayo, solemnidad de Pentecostés, recibió la púrpura cardenalicia en la víspera en la solemnidad de los santos apóstoles Pedro y Pablo.
Doce días antes, fue ordenado obispo, en la parroquia de San Antonio María Claret de Madrid. Reside en Madrid.
(RD/ED)
Monseñor Aquilino Bocos fue creado Cardenal por el Papa Francisco:https://t.co/esSJLYJDRW pic.twitter.com/WUYT2gkTnh
— Claretianos del Sur (@ClaretianosSur) 29 de junio de 2018