No deja de sorprendernos la cantidad de propiedades que tiene el café.
Que el café puede ser un verdadero ‘resucitador’ lo sabemos todos los que somos aficionados a esta bebida.
Es una bebida popular en todo el mundo.
Y tiene una historia y una serie de curiosidades interesantes:
- Descubrimiento del café: Según la leyenda, el café fue descubierto por un pastor etíope llamado Kaldi en el siglo IX. Observó que sus cabras se volvían más enérgicas después de comer los frutos de un arbusto, que resultó ser el café.
- Origen de la palabra «café»: La palabra «café» proviene del término árabe «qahwa,» que originalmente se refería al vino. Luego, se adoptó para la bebida que conocemos hoy en día.
- El café y la Revolución de las Trece Colonias: Durante la Revolución de las Trece Colonias en América, el café se convirtió en la bebida preferida debido a la influencia de los impuestos británicos sobre el té. Esto llevó a la creación de la Bolsa de Café de Nueva York en 1882.
- La bebida más consumida del mundo: Después del agua, el café es la bebida más consumida en el mundo. Se estima que se consumen más de 2.25 mil millones de tazas de café cada día.
- El «café más caro del mundo»: El café Kopi Luwak de Indonesia se ha ganado la reputación de ser uno de los más caros del mundo. Se produce a partir de granos de café que han sido ingeridos y luego excretados por un civeta, un pequeño mamífero. Los granos pasan por un proceso de fermentación en el sistema digestivo del animal antes de ser recolectados, lavados y tostados.
- Café descafeinado: El café descafeinado se inventó en Alemania en 1903. Fue desarrollado por Ludwig Roselius, quien descubrió el proceso mientras intentaba descafeinar granos de café que se habían mojado en agua de mar durante un viaje en barco.
- La planta del café es un arbusto: El café se cultiva a partir del grano de la planta de café, que en realidad es un arbusto. Aunque es pequeño, puede crecer hasta convertirse en un árbol si se le permite.
- El café y la primera webcam: En 1991, científicos de la Universidad de Cambridge instalaron la primera webcam en el laboratorio de la Universidad. La razón de esto era permitir a las personas verificar el estado de la cafetera y saber si había café fresco sin tener que levantarse de sus escritorios.
- Café y el comercio justo: El café es uno de los productos más prominentes en el movimiento de comercio justo. Este movimiento busca garantizar que los productores de café reciban un precio justo por su producto y promover prácticas agrícolas sostenibles.
- El café es antioxidante: El café es una fuente rica de antioxidantes, que pueden ayudar a proteger las células del cuerpo contra el daño causado por los radicales libres.
LA CONDUCTA HUMANA
Para muchos, tomar el café sin azúcar resulta muy complicado, sobre todo cuando es café solo sin leche, ni nada para endulzarlo.
Se trata de un sabor muy amargo para el que hay que estar muy acostumbrado.
Por eso, cuando restringimos el azúcar no lo disfrutamos tanto.
Si lo tomamos de esta manera es porque estamos demasiado dormidos, y necesitamos desesperadamente despertarnos.
Pero no es el caso de todo el mundo.
Seguramente todos conozcamos a ese amigo extraño -porque para nosotros, por supuesto, es extraño- que nunca le pone azúcar al café…
Pues según un estudio de la Universidad de Inssbruck en Austria, habría que vigilarle muy de cerca.
Y es que el estudio sostiene que las personas que prefieren el café sin azúcar tienen tendencia a ser más malvados.
Y no ocurre solo con el café sin azúcar: también se aplicaría a las personas a las que les encanta el chocolate amargo, agua tónica o los rábanos.
El estudio se basó en una serie de encuestas a hombres y mujeres con una edad promedio de 35 años promedio, en las que se les preguntó sobre sus preferencias en sabores, o sea, si les gustaba más lo dulce, salado, amargo o ácido.
Posteriormente, compararon esos resultados con los análisis de personalidad que le hicieron a las mismas personas para medir sus niveles de agresividad.
Y el estudio reveló algo sorprendente: las personas que preferían los sabores amargos tendían a presentar rasgos de psicopatía, narcisismo, sadismo y maquiavelismo.
Por el contrario, a quienes les gustaba más de lo dulce, eran más amables.
Los investigadores no se quedaron con ese primer estudio, y decidieron continuar investigando el motivo de la relación entre el sabor amargo y estas cualidades.
Lo que descubrieron fue que las personas asocian el sabor amargo con «algo peligroso«, y encuentran satisfacción en consumir algo con esa carga de riesgo.
Eso sí, no perdamos la cabeza: hay que tener en claro que el que a una persona le guste lo amargo no significa necesariamente que sea malvado, ya que los gustos pueden cambiar con los años y no es 100% determinante en la personalidad de nadie.
