(PD).- Tom Waits tocará por primera vez en España el próximo sábado, en el Kursaal de San Sebastián. A ese concierto le seguirán dos noches en Barcelona, los días 14 y 15. De esta forma, Waits trae a España su gira ‘Glitter and Doom’, que le llevará después a otras ciudades europeas, como Milán, Praga, París, Edimburgo y Dublín.
Los conciertos se desarrollarán en recintos más bien pequeños, esto es, teatros y auditorios, y serán pocos los afortunados que verán a la voz más destrozada y áspera del viejo oeste americano. Conseguir una entrada no ha sido fácil, porque la expectación es máxima y porque los requisitos no han siddo pocos: las entradas se han limitado a dos por persona, incluyendo el DNI o número de pasaporte del comprador en ambos tickets.
Además, los asistentes con entrada necesitarán una identificación con fotografía (DNI o pasaporte) que corresponda al DNI o Pasaporte impreso en las entradas para poder acceder a los recintos. Y el precio no se queda atrás: entre 100 y 125 euros (que tendrán que pagar también los medios acreditados).
Waits tocará con su aliado musical Larry Taylor al bajo, con Omar Torrez a la guitarra, Patrick Warren en los teclados, Casey Waits a la batería y a la percusión y Vincent Henry al saxo, a la armónica y a la guitarra.
“Tocan con la precisión de un coche de carreras y todos son verdaderos prestidigitadores. Hago canciones con ellos que nunca he intentado tocar fuera del estudio. Todos son multi-instrumentistas y bailan la polka como hombres de verdad”, dice un Waits cada vez más experimental.
Waits llegará a Europa tras unas semanas de conciertos en el sur profundo de Estados Unidos, del que ha comentado, “vamos al sur profundo, donde todavía adoran a un hombre que lleve pantalones rojos y le hacen sentir bienvenido”. Si en Europa mantiene el esquema de esos trece conciertos, la incógnita permanecerá hasta el final, pues en cada uno de ellos, de Phoenix a Atlanta, cambió el repertorio.
Sólo repitió en todos «Way down in the hole», además de «Lucinda», utilizada invariablemente para abrir sus actuaciones, en las que no obstante dio preferencia a los temas de álbumes como «Rain dogs», «Bone machine», «Mule variations» y «Real Gone», éste el más reciente de los cuatro.