La Confederación Hidrográfica contesta con rotundidad al presidente Barreda

El último campo de golf creado en la cuenca del Segura está en la tierra natal de Bono

La Confederación Hidrográfica del Segura ha contestado categóricamente al presidente de la Junta de Comunidades, José María Barreda, y ha revelado que el último campo de golf aprobado en la cuenca está en la tierra natal de José Bono.

La corporación hidrográfica ha desmontado el informe de la Univerdidad de Castilla-La Mancha, que ponía en duda que en el Segura se estuviese cumpliendo la normativa en materia de riego de este tipo de instalación deportiva con aguas del trasvase Tajo-Segura.

El presidente de la Confederación Hidrográfica del Segura (CHS), José Salvador Fuentes Zorita, ha desmentido este martes de forma rotunda en rueda de prensa que los campos de golf de la cuenca se rieguen con agua del trasvase Tajo-Segura, y ha dicho que utilizan agua de depuradoras o transitoriamente de pozos.

«La Confederación no ha suministrado ni una sola gota de agua del trasvase a ningún campos de golf, ni de dentro ni de fuera de la cuenca hidrológica», ha asegurado Fuentes Zorita, quien ha recalcado que el agua sólo se destina a sus usos legítimos, es decir, abastecimiento humano y riegos.

La Junta de Castilla-La Mancha dio a conocer un informe en el que afirma que los campos de golf de Murcia se riegan con agua del trasvase, y que en los últimos cuatro años han abierto 17 campos de golf.

Fuentes Zorita ha asegurado que no funcionan ni la mitad de los citados campos de golf que afirma el informe y ha afirmado que no se necesita una investigación especial para saberlo, ya que en la web de la CHS se informa al respecto.

También ha aclarado que la cuenca del Segura sólo afecta a Murcia, sino que la cuarta parte está en Albacete, y ha comentado que el último campo de golf aprobado en la cuenca ha sido el de Hellín (Albacete).

En este sentido, ha recordado que en la Junta de Gobierno de esta confederación hay dos representantes de Castilla-La Mancha con cargos de directores generales, «que están perfectamente informados», por lo que ha considerado preferible que primero se pidiera información para luego opinar, porque el problema surge cuando la información no coincide con la opinión ya dada, agregó.

«Si alguien conoce un situación de fraude en la cuenca, lo que debe hacer es denunciarla», ha señalado antes de apuntar que en un Estado de Derecho, si alguien acusa de un delito, tiene la obligación de probarlo.

 

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