Se especifica que el gobierno regional "debería ejercitar las funciones de ordenación, control, inspección sanción e intervención" en este ámbito y que de haberlo hecho adecuadamente en este caso, "podrían haberse impedido parte de las irregularidades
Cuando el presidente del PSOE de Castilla-La Mancha, José Bono, y todo su entorno intentan trasladar a la opinión pública una imagen limpia e impoluta, salta otro dato que apuntala el escándalo continuo en el que parece se ha venido desarrollando la actividad política del hoy presidente del Congreso de los Diputados.
El Tribunal de Cuentas ha trasladado el caso al Fiscal Anticorrupción al haberse detectado irregularidades con relevancia penal.
El fiscal del referido Tribunal, Olayo Eduardo González, ha tomado la decisión de trasladar el caso a Anticorrupción por haber detectado irregularidades con relevancia penal en el caso.
Es preciso recordar que el Ayuntamiento de Seseña adjudicó 1,8 millones de metros cuadrados a El Pocero en 2003 para su macroproyecto urbanístico en un proceso trufado de irregularidades que no fueron detectadas por la Junta de Castilla-La Mancha, entonces presidida por José Bono. Un año después, Francisco Hernando se encargó de unas obras de remodelación en la hípica del presidente del Congreso.
En el informe que será trasladado a Anticorrupción, en el que se ha implicado el Ministerio Fiscal, se especifica que la Junta regional «debería ejercitar las funciones de ordenación, control, inspección sanción e intervención» en este ámbito y que de haberlo hecho adecuadamente en este caso, «podrían haberse impedido parte de las irregularidades».
El fiscal ha tomado, además, otras dos medidas. Por un lado, abrirá diligencias para esclarecer responsabilidades desde el punto de vista de las cuentas públicas. Por otro, reactivará una denuncia presentada en 2003 por el actual alcalde de Seseña contra el Pocero y un concejal socialista, posteriormente retirada. En opinión de la Fiscalía, la supuesta malversación de caudales públicos objeto de la denuncia es perseguible de oficio.