El vehículo acaba de incorporarse a la circulación tras salir de un garaje próximo
Un hombre de 79 años de edad cliente habitual de un bar de Ourense ha resultado herido de carácter grave tras empotrarse contra el establecimiento un vehículo conducido por una mujer de 66 años, que quedó herida leve junto a otra persona que estaba en el local.
El accidente tuvo lugar pasadas las 8.45 horas en la Cafetería Sil, ubicada en la confluencia de la calle Bedoia con Valle-Inclán, en la ciudad de Ourense.
Según ha explicado a Europa Press el camarero que se encontraba en el local en el momento de los hechos, cuando estaba poniendo un café de espaldas a la entrada escuchó un estruendo y pensó «que era una bomba».
Cuando se giró, según ha relatado, vio que se había empotrado un coche contra el local, que conducía una mujer mayor. Según ha resaltado, el vehículo atropelló a un cliente habitual que salía de la cafetería, Antonio P.S., de 79 años y vecino de Ourense.
Este herido fue evacuado con pronóstico reservado en una ambulancia al Complexo Hospitalario de Ourense (CHOU), indicaron fuentes policiales.
TRATABA DE ESQUIVAR OTRO COCHE
La conductora, que guiaba un coche automático, había salido de un garaje situado a unos 20 metros del establecimiento e intentaba esquivar a otro vehículo que circulaba por la calle cuando se empotró contra el local.
La Policía Local de Ourense ha explicado que, por causas que se investigan, la conductora aceleró y se salió de la calzada por el margen izquierdo, se subió a la acera y acabó colisionando contra la fachada de la cafetería.
Como consecuencia de la maniobra el vehículo atropelló a un peatón que salía de la cafetería, A.P.S., y, tras el impacto contra el local, restos de la pared salieron despedidos hacia el interior del establecimiento, que alcanzaron a un cliente, S.R.A., de 42 años y vecino de Ourense, que resultó herido leve.
Por su lado, la conductora, M.A.P.O., de 66 años y vecina de Ourense, fue llevada junto con los otros dos heridos al CHOU en estado leve, según la primera evaluación sanitaria.
Tras regular los agentes la circulación en la zona durante más de media hora, se instruyó el atestado correspondiente. Además, las mismas fuentes precisaron que se produjeron «daños de consideración» al quedar un boquete en la fachada.
