Tofiño es íntimo amigo de Fernando Mora, García-Page y Barreda; un tándem que gobierna el feudo socialista de los señoritos que se aprovechan de su cargo
El presidente de la Diputación de Toledo y alcalde de Illescas, José Manuel Tofiño, ha vuelto a generar otro escándalo. En esta ocasión, se le acusa de haber usado los servicios de una empresa subcontratada por el Ayuntamiento para limpiar el garaje de su domicilio. Los hechos ocurrieron a raíz de las inundaciones que asolaron el municipio toledano el pasado mes de septiembre.
No tuvo reparos en llamar a los empleados del Ayuntamiento para que dejaran de trabajar en las obras municipales y se fueran a achicar el agua de su casa. Tofiño ha abusado de su cargo para recibir un beneficio personal. Según relatan testigos del acto, los servicios municipales no quisieron ayudar al resto de afectados por las inundaciones, hecho que hubiera evitado que saltara esta polémica. Si hace dos semanas Tofiño era noticia por derrochar 200.000 euros en las cestas de Navidad de la Diputación, ahora se destapa una nueva polémica del alcalde illescano.
En el Pleno celebrado el pasado 1 de octubre, el portavoz del Partido Popular, Francisco Romo, preguntó por este escándalo a la concejal socialista responsable del área de urbanismo, Rebeca Alonso, quien tuvo que dar la cara por el alcalde ya que éste no se encontraba presente. Alonso se limitó a decir que «eso no era cierto y que era imposible». Tampoco se han presentado, de momento, facturas que justifiquen el pago por los servicios prestados.
El alcalde ya ha protagonizado numerosos escándalos en el municipio illescano. El más sonado de todos fue la clausura del cementerio municipal para construir otro que lleva ya varios años en funcionamiento y que sigue sin algunos permisos necesarios de Sanidad.
Con la crispación que habita en la población toledana por la astronómica deuda de 9 millones de euros que tiene el consistorio, este suceso ha abierto más frentes al socialista Tofiño, quien añora tiempos remotos y ve cómo los illescanos han dejado de confiar en él.