Los saharauis que viven en Canarias tienen un mosqueo más que considerable con el Ejecutivo de Zapatero. Después de las últimas declaraciones del presidente y de las manifestaciones de los ministros que tienen ciertas atribuciones, los originarios del territorio asediado por Marruecos tienen cada vez más claro que no se pueden fiar de las intenciones de España, al menos con el actual Ejecutivo.
Por eso, los saharauis buscan otros interlocutores más válidos. Después de lo acaecido en el Congreso de los Diputados, con detención incluida de algunos activistas que simplemente hicieron patente su descontento con una declaración contra nadie, el PSOE ha dejado de ser un referente para ellos.