El presidente Barreda se ha quedado sin apoyos en C-LM. Con la situación que se ha creado, el Ejecutivo ha perdido totalmente la credibilidad de la sociedad
Tanto CCOO como UGT en Castilla-La Mancha han manifestado públicamente su disconformidad con el paquete de medidas aprobado el viernes por el Consejo de Ministros. Según los sindicatos, estas medidas les está abocando a una «confrontación contundente» antes de su entrada en vigor el 28 de enero, en la que no descartan convocar una huelga general.
Mientras tanto, el presidente de la Junta está intentando acallar y tranquilizar a los «peces gordos» de los sindicatos para que no le causen más problemas. Es por ello por lo que el secretario general de CCOO, José Luís Gil, ya está contratado como bloguero estrella de la web del PSOE manchego.
Los movimientos que se están produciendo en las formaciones sindicales castellano-manchegas no dejan indiferente al Ejecutivo de Barreda, que está contemplando dese su sillón presidencial el caos que se ha generado entre la ineficacia de sus políticas de empleo y los preocupantes recortes que Zapatero está haciendo a nivel nacional.
Tanto el secretario general de UGT, Carlos Pedrosa, como Gil, han destacado la importancia de que el Plan de Choque se reedite en la región, aunque consideran que no es «imprescindible» el acuerdo con los empresarios. Ambos quisieron dejar claro que serán «tremendamente beligerantes» para conseguir que se lleve a cabo esta medida.
Y como las desgracias nunca vienen solas, al aristócrata socialista se le ha juntado un final de legislatura marcado por la estrepitosa situación general que está atravesando la comunidad con las amenazas de los sindicatos y la poca credibilidad que muestra en la actualidad Barreda a los diversos sectores sociales de la región
«Es de justicia» que Barreda haga algo. «Este Gobierno no puede omitir su compromiso con la gente que no tiene nada y dejarlos en la cuneta»», dijo Gil.
Tal es la situación que atraviesa la comunidad castellano-manchega que hasta el propio ex presidente socialista, José Bono, quiso dejar claro recientemente que está a favor de los planes de austeridad que defendió María Dolores de Cospedal en la presentación de su proyecto económico.
Los revuelos sindicalistas que ya se están gestando en Castilla-La Mancha apuntan a participar de la asfixie que está sufriendo el feudo socialista castellano-manchego.
