El 2011 será un año muy duro para el presidente regional. Después de tantos años en el poder, la sociedad ha conocido realmente a los socialistas manchegos
El presidente Barreda sigue dando la callada por respuesta. Poco se sabe del plan de reequilibrio económico-financiero impulsado por el socialista y anunciado por la vicepresidenta y consejera de Economía y Hacienda, María Luisa Araújo.
Gobernando la comunidad autónoma con más déficit de toda España, José María Barreda afirma haber adoptado medidas urgentes contra el desastre económico de la región castellano-manchega. Lo curioso es que el socialista se muestra inquebrantable ante su plan de reestructuración. Nadie sabe en qué se basa exactamente el nuevo proyecto del ‘ideólogo‘ Barreda.
Así lo ha anunciado en rueda de prensa el secretario general del PP de Castilla-La Mancha, Vicente Tirado, quien ha precisado que el presidente tiene la obligación de explicar en el Parlamento regional, antes de que finalice el año, el contenido de dicho plan, y la situación «real» por la que atraviesa la Comunidad.
Según El Digital de Castilla-La Mancha, los populares no confían en el plan de «reequilibrio», según ha afirmando Tirado. El PP considera que al igual que los anteriores, será «papel mojado», ya que la comunidad se encuentra en «suspensión de pagos, en quiebra técnica y arruinada», y por tanto «intervenida de facto».
El día antes de aprobar los presupuestos regionales del 2011, la propia consejera de Economía y Hacienda aseverara que se van a modificar ante la necesidad de volver a realizar «reajustes», como consecuencia de la publicación de la deuda y el déficit, datos, ha apuntado que han sido un «jarro de agua fría»
La marchitada credibilidad del gobierno de Barreda ha sido alimentada últimamente con los sucesivos escándalos económicos, los amiguismos y las acusaciones de blanqueo de dinero.
Tirado, que ha criticado la «ausencia del presidente, que se ha pasado un día y medio escondido en los despachos», ha incidido en la necesidad de pedir responsabilidades ya no solo políticas sino «patrimoniales» tanto a Barreda como a Araújo, pues a su juicio han sido los artífices de que Castilla-La Mancha esté en «situación de alarma económica»
El número dos del PP regional ha recordado que el presidente regional ha incrementado la deuda en 5.000 millones de euros en los seis años que lleva al frente del Ejecutivo regional. Cuando Barreda tomó el relevo de José Bono, la cifra ascendía a 1.400 millones.
