La siempre controvertida diputada de CC Dulce Pérez Xerach pone el dedo en la llaga y reflexiona sobre la verdadera utilidad del Parlamento de Canarias, al menos tal y como está concebido y si sus diputados tienen, en realidad, el poder de decidir las cosas o sólo son meros ejecutores de órdenes que emanan desde fuera.
Escribe en tono ciertamente apesadumbrado la parlamentaria en La calle y nosotros que «con ‘nosotros’ me refiero a los 60 privilegiados parlamentarios canarios. Cada día que venimos a un pleno hay más manifestaciones en la calle. Cada día escucho más intensamente que nos llaman – a todos- ladrones. Y me pregunto ¿ como va a evolucionar esto? ¿ podemos hacer algo más nosotros que somos simples parlamentarios? Quiero decir individualmente ¿qué puedo hacer?»
Bosqueja Xerach Pérez un cierto alejamiento de la Cámara regional con respecto al común de los ciudadanos y la preocupación por no tener el mando en ciertas decisiones. La diputada expone que «me pregunto si realmente estamos separados de la calle o si -como creo- la entendemos, pero estamos atados de pies y manos. Me pregunto si con tanta decisión presupuestaria que nos llega desde fuera somos realmente una democracia, incluso me pregunto si alguna vez lo fuimos del todo. Me pregunto si con tanto agobio por tantos lados somos capaces -unos y otros- de pensar con claridad y tranquilidad».
Finalmente, la diputada nacionalista aboga por ese cambio de sistema ante el poder que ejercen otros grupos con más capacidad de decisión que la casta política. «Me pregunto si realmente los que tienen mucho más poder que nosotros (los simples parlamentarios canarios de a pie de todos los partidos ) se dan cuenta de la necesidad total de cambio de sistema. Me pregunto si se dan cuenta de que la sociedad sí está cambiando. Me pregunto si tendremos fuerza y energía para aguantar todo lo que nos queda por pasar como sociedad y para superarlo. Y me pregunto tantas cosas más…».
