"Bastantes exigencias tiene el ente con su personal laboral como para hacerse cargo de aquel que, mientras los juzgados no digan lo contrario, no depende de la compañía pública"
El director xeral de la CRTVG, Alfonso Sánchez Izquierdo, se ha valido de la última Comisión de control de la compañía de este año 2010 para trata de justificar el fin de la externalización de los servicios informativos y el consiguente cierre de delegaciones.
Así, ha defendido la «necesidad» de poner punto y final a un sistema «inviable» que «deterioraba la imagen» del ente público y que ocasionaba «reiteradas» sentencias judiciales «semana a semana», insistiendo en que
«La CRTVG no despidió a nadie, lo único que hizo el 30 de noviembre fue no renovar contratos con productoras privadas. Bastantes exigencias tiene el ente con su personal laboral como para hacerse cargo de aquel que, mientras los juzgados no digan lo contrario, no depende de la compañía pública»
En todo caso, ha explicado que «consciente» de las repercusiones laborales del cambio de modelo, la compalía baraja impulsar «un plan social de recolocaciones», convocando «en un cortísimo plazo» la apertura de una lista de nuevas contrataciones «para trabajos de sustitución o de carácter temporal y otro tipo de gestiones».
En cuanto a las delegaciones que se mantienen, Sánchez Izquierdo ha asegurado que la pretensión de la CRTVG es contar con medios propios en todas ellas lo más pronto posible.