Defiende a Barreda frente a la huída del socialista García-Page de las listas regionales

El corresponsal de Sopena en Castilla-La Mancha ‘pone a caldo’ al jefe del PSOE de Toledo por la espantada

Duda de su futuro si no logra vencer y critica las excusas que ha puesto para declinar la invitación del presidente regional

El corresponsal de Sopena en Castilla-La Mancha 'pone a caldo' al jefe del PSOE de Toledo por la espantada
Carlos Iserte, José María Barreda y Enric Sopena

¿Y si GPS no consigue los suficientes votos para mantener la alcaldía? ¿Qué hará? ¿Se quedará como jefe de la oposición? No me lo creo

El periodista Carlos Iserte ha publicado recientemente un artículo en el que critica duramente a uno de sus máximos ‘amigos’ políticos, Emiliano García-Page. El motivo de la crítica ha sido la comentada espantada que el alcalde socialista de Toledo ha dado a su aliado Barreda tras negarse a ir en las listas electorales de la región.

A pesar de que Iserte no suele tener nunca malas palabras para Barreda ni para Page, ahora no se ha escondido y ha querido mostrar y respaldar al presidente regional. El revuelo que se ha levantado tras la huída del alcalde de Toledo ha supuesto un duro golpe para el entorno socialista.

Es obvio pensar que Iserte tiene que defender a capa y espada a su ‘mentor’ político, el socialista Barreda. Aparte de trabajar como corresponsal de Enric Sopena en la región, el periodista también es un asiduo de Castilla-La Mancha Televisión (CMT).

Anoche mismo volvió a ir a El Debate de CMT, un programa caracterizado por la propaganda pura y dura que se hace del señor Barreda y por su pésima audiencia

Barreda no escatima en dar oportunidades laborales a Iserte, quien tiene demasiado trabajo en intentar vender las bondades del secretario socialista de la región. El artículo de opinión que publicó el pasado domingo La Tribuna pone de manifiesto que Iserte ya se ve obligado a batallar hasta con los propios socialistas con tal de seguir defendiendo al marchitado presidente de C-LM.

El periodista pone de vuelta y media al alcalde de Toledo. Iserte detalla el nombre completo del socialista en cuestión, para después emplear reiteradamente sus iniciales, unas siglas cargadas de ironía.

Emiliano García-Page Sánchez (GPS) protagonizaba una sonora espantada al renunciar a la candidatura a las Cortes regionales encabezada por el presidente José María Barreda. Creo que GPS ha cometido el error de su vida.

Si Iserte pretende seguir defendiento descabelladamente a Barreda, tiene tres meses muy duros por delante, ya que él mismo ha podido comprobar que hasta GPS no ha aceptado la petición expresa y pública que le hizo el presidente el año pasado para que le acompañara la próxima legislatura.

¿A costa de qué se ha mostrado partidario Iserte? ¿Cuántos miles de euros cobran los tertulianos de CMT por dar sus opiniones previsibles y partidistas?

Removiendo más la polémica, Iserte añadió que estaba «convencido de que el alcalde de Toledo se arrepentirá eternamente de no haber estado dentro donde se cocerá la ineludible sucesión del actual inquilino de Fuensalida, puesto que en 2015 no podrá ser candidato. ¿Quién será, entonces, el sustituto de Barreda? Con este plante García-Page lo tiene muy difícil, por no decir imposible».

GPS justifica su decisión porque entiende que «este es un momento vital y estratégico para la ciudad que requiere que me centre en Toledo». ¿Y qué mejor que reforzar esas necesidades desde un escaño de Gilitos? ¿Es que acaso el medio centenar de concejales y alcaldes/diputados no defienden sus ciudades?

Es una pena que GPS haya decidido restar en vez de sumar

Finalmente, Iserte aprovecha para dudar sobre la victoria de GPS en la ciudad de Toledo.

¿Y si GPS no consigue los suficientes votos para mantener la alcaldía? ¿Qué hará? ¿Se quedará como jefe de la oposición? No me lo creo. Y es que al renunciar a ir en la candidatura autonómica, declina también liderar al PSOE regional si no renueva su mandato alcaldable.

Eso sí, siempre le quedaría volver con Bono y acompañarle al Congreso como diputado (¡Adiós, Alonso, adiós!), sin que por ello tuviese que ceder su acta de concejal, justo lo contrario de lo que defiende ahora. Qué pena, GPS, qué pena.

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