El presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, ha asegurado que no «da igual quien gobierne» en la región tras elecciones del próximo 22 de mayo y ha asegurado que quiere seguir gobernando para «seguir construyendo uno de los mejores sistemas» sanitarios, educativos y sociales.
Barreda ha hecho estas declaraciones durante un acto de precampaña en el polideportivo ‘Antonio Díaz Miguel’ en Alcázar de San Juan (Ciudad Real), en el que ha estado acompañado del presidente del Congreso, José Bono, de la ministra de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino, Rosa Aguilar, del secretario de Organización del PSOE, Marcelino Iglesias y del vicepresidente primero del Gobierno, Alfredo Pérez Rubalcaba, de quien ha dicho que es un «hombre de Estado» que con su «experiencia transmite confianza».
Barreda ha dicho que «no siempre hubo estos servicios» sociales, educativos y sanitarios y ha avisado que «no está escrito que sean irreversibles», ya que depende de la prioridad que le den los gobiernos a estos servicios, algo que su gobierno le seguirá dando, si continua en el poder, absoluta prioridad.
Como ejemplo, ha destacado que en 2010 el transporte aéreo de la región salvó 500 vidas, por lo que ha dicho, usando una frase de Antonio Machado, que «es de necios confundir valor con precio».
Asimismo, ha señalado que «ha costado mucho hacer esta región», por lo que no le cabe en la cabeza que la presidenta del PP de Castilla-La Mancha, Maria Dolores de Cospedal, «quiera gobernar estando más tiempo en Madrid que en la región», algo que ha considerado «insultante». Además, el jefe del Ejecutivo autonómico ha criticado que Cospedal «pida austeridad y esté cobrando 40 millones de pesetas»
En cuanto a la energía nuclear, el presente ha recalcado que no ni quiso, ni quiere, ni querrá el Almacén Temporal Centralizado (ATC) de residuos nucleares, al contrario que Cospedal, que ha dicho que «ni quiere ni deja de querer» el silo nuclear. «¡Qué profundidad!», ha ironizado Barreda.
Igualmente, Barreda ha defendido la prioridad de Castilla-La Mancha en el uso del agua del Tajo y ha añadido que la tubería manchega va a beneficiar a 600.000 habitantes, medida necesaria porque a su juicio era «insultante e insoportable que pueblos de la provincia de Cuenca vieran pasar el agua y no la tuvieran en sus casas».
Además, ha defendido que se debe garantizar una lámina de agua permanente en los pantanos de Entrepeñas y Buendía y que el Tajo tenga un caudal ecológico, al tiempo que ha asegurado que la Junta «no va a parar» hasta conseguir que las personas se puedan bañar en las aguas de este río.
