La estafa de los falsos inspectores de gas ‘resucita’ en Santa Cruz de Tenerife. El último caso producido se generó el pasado lunes 23 de mayo en la zona de Tomé Cano. Tres individuos, perfectamente ataviados con lo que parecía ser el uniforme de mantenimiento de una empresa de gas y un enorme maletín, entraron en un edificio de varias viviendas tratando de colarse en las mismas con el argumento de que venían de parte del Instituto Canario de Prevención (que no existe como tal, al menos con esa denominación).
Los timadores sólo pudieron entrar en una casa, concretamente la de un matrimonio mayor. Sin embargo, la sorpresa para estos individuos fue que cuando reclamaron la factura por los servicios prestados, 100 euros, el esposo alegó que no tenía dinero. Los supuestos empleados le requirieron para que buscase lo que fuese por los cajones, pero éste no se arredró y no solamente les abrió la puerta, sino que además empezó a elevar el tono para que otros vecinos lo oyesen y saliesen al rellano, tal y como así sucedió finalmente.
Lo cierto es que este modus operandi no es nuevo y la Policía Nacional recuerda que hay que optar por la prudencia y no abrir si previamente no se ha concertado la visita de estos operadores. Además, deben venir acreditados por Industria y presentar las tarifas oficiales.
La Policía advierte de otro detalle importante. Estos estafadores, que además no es la primera vez que actúan, suelen decir a los inquilinos que vienen a efectuar la revisión obligatoria del gas, y cuando éstos ponen algún tipo de impedimento, son amenazados con multas millonarias y con el corte del suministro, o les atemorizaban mostrando recortes de periódicos con siniestros por explosiones de gas.
