Las agresiones a los policías quedaron grabadas por las cámaras de la comisaría de Tetuán

El caradura Curbelo (PSOE) exigió una redada en la sauna erótica que el mismo había destrozado

El político comunicó su detención al presidente de la Cámara Alta, Javier Rojo

El caradura Curbelo (PSOE) exigió una redada en la sauna erótica que el mismo había destrozado
Detalle de la entrada de la sauna y Casimiro Curbelo.

Los detalles sobre los graves incidentes protagonizados por el senador socialista Casimiro Curbelo son aun más turbios y delictivos de lo que pudiera pensarse. El político, que también ejerce la presidencia del Cabildo de La Gomera, agredió en plena comisaría a un funcionario porque no quiso atender su petición de que dispusiera un operativo para hacer una redada en el local en el que, pásmense ustedes, previamente había destrozado mobiliario y había intentado mantener relaciones sexuales sin pagar por los servicios.

El experto policial en Intereconomía, Rodrigo Gavilán, explicó con pelos y señales todo lo que pasó en las primeras horas del 14 de julio de 2011 –Los «tumultos» de Casimiro Curbelo en Gola-:

Casimiro Curbelo deberá responder por tres causas penales; un delito de daños, una falta de lesiones más injurias y calumnias, originados dentro del club de alterne, por haber roto varios vasos, una mesa de cristal y un cristal de grueso tamaño.

Este señor sale del Senado y se dirige a cenar a una marisquería del centro de Madrid. Posteriormente, opta por ir a un club de alterne que se llama Gola y además en la web de este local se puede comprobar que las señoritas que aparecen en las fotos no son convencionales, sino señoritas de compañía. Además, este señor va acompañado de su hijo y empiezan a consumir diversas bebidas alcohólicas hasta que a las siete de la mañana se ponen faltones y empiezan a insultar a las señoritas».

Cuando se le intenta frenar por parte de empleados del local, Gavilán resalta que:

Empieza a arremeter contra el mobiliario, rompe vasos, una mesa de cristal, se pelea con los porteros, con los camareros. Esto es lo más parecido al senador ‘Torrente’. Se le expulsa del local tras estos incidentes y el coge su carné de senador y se dirige a la comisaría de Policía de los bajos de Tetuán, que está a menos de 50 metros de este local.

Cuando llega a las dependencias policiales, se encuentra con un funcionario joven al que le increpa y le exige que le acompañe y que monte un operativo para que le acompañe y vaya al local a hacer una redada. Es más, le llega a decir al policía que los agentes estaban a las órdenes del senador.

El agente, cumpliendo el protocolo, le dice que esos no son los pasos a seguir, que primero tiene que presentar la correspondiente denuncia y, además, en comisaría llamar a los refuerzos por si fuese preciso ir al local y hacer una redada para identificar a los presuntos agresores. La respuesta de Curbelo fue la de propinar una torta a este agente. El policía avisa por radiotransmisor de lo que estaba pasando y cuando llega una patrulla en auxilio de este funcionario al que había agredido, el senador se encara con otro agente al que le rasga la camisa.

Y detalla que:

Evidentemente, aunque los senadores están aforados, ante la comisión de un delito flagrante se le detiene. Además, las cámaras de seguridad que dan al exterior de la comisaría lo han grabado todo, pero, curiosamente, esa cinta, en la tarde del 14 de julio, no se había remitido al juzgado.

Cuando a una persona se le detiene en virtud del artículo 520 de la Ley de Enjuiciamiento Criminal, tiene cinco derechos que le asisten y uno de ellos es comunicar la detención a aquellas personas que quiera que sepan dónde está detenido. Casimiro Curbelo el nombre que da es el del presidente del Senado, Javier Rojo. Se le comunica la detención y, no se sabe por qué, un alto cargo de esta institución, en concreto el comisario jefe de la Comisaría especial del Senado se interesa por el asunto, se persona en la comisaría de Tetuán y el propio comisario del distrito está presente en la declaración.

Se sabe además que se le toma declaración a las dos y cuarto de la tarde y se le acaba poniendo en libertad con cargos, pero sin fianza.

LAS TARIFAS QUE NO QUISO PAGAR

Gola, el local de alterne en el que Curbelo y su hijo tuvieron el incidente por, entre otras razones, tratar de mantener relaciones sexuales sin pagar, dispone en su página web de las tarifas por los servicios. Desde lo más económico, 60 euros por 20 minutos, a los 150 euros que saldría estar con una de las chicas durante una hora.

CONTRIBUYE CON PERIODISTA DIGITAL

QUEREMOS SEGUIR SIENDO UN MEDIO DE COMUNICACIÓN LIBRE

Buscamos personas comprometidas que nos apoyen

COLABORA

Lo más leído