El coste a precio de mercado estimado por los servicios de la Administración regional es de 67.875 euros
El Ejecutivo de Castilla La Mancha, que dirige la popular María Dolores de Cospedal desde el pasado mes de mayo, ha pedido por carta a altos cargos de la última administración socialista que devuelva los 113 teléfonos smartphones -Iphones en su mayoría- que les fueron entregados en función de su cargo, por su pertenencia a organismo públicos y para cuestiones estrictamente laborales.
Las misivas, firmadas por la secretaria general de Presidencia de la Junta, Mar España, recuerdan que estos teléfonos de gama alta son bienes públicos de los que disfrutaban en cesión de uso debido a sus responsabilidades en la administración castellano-manchega.
A PILLAR QUE PAGA EL CONTRIBUYENTE
Se puntualiza y con toda razón que, al cesar en las mismas, deben devolverlos.
El personal de las diferentes consejerías ha elaborado un proliho informe, según el cual aún no han sido devueltos cien teléfonos marca iPhone, once marca Blackberry y dos Nokia modelo N8.
El coste a precio de mercado de todo ese matewrial tecnológico de alta gama son 67.875 euros:
- 699 euros por cada iPhone4
- 499 euros por iPhone3
- 399 euros por los Nokia N8
- 299 euros por las Blackberry
Entre quienes deben devolver los teléfonos hay varios consejeros del anterior Gabinete, pues sólo los han entregado la ex vicepresidenta y consejera de Economía, María Luisa Araújo, y el que fuera responsable de Salud y Bienestar Social, Fernando Lamata.
El resto de los que han ‘afanado’ los aparatos y se los han llevado a casa como si fueran suyos son directores generales, jefes de gabinete, responsables de comunicación de las consejerías y de la Presidencia y delegados provinciales.
NADIE LIBRE DE PECADO
Por departamentos, la Junta reclama la devolución de 37 teléfonos de altas prestaciones de personal adscrito a la Consejería de Presidencia y Administraciones Públicas; 21 de Agricultura y Medio Ambiente; 20 de Educación, Cultura y Deporte; 18 de Ordenación del Territorio y Vivienda; 7 de Sanidad y Asuntos Sociales; 5 de Economía y Hacienda y otros 5 de Empleo.
Además de los teléfonos de alta gama, la Junta ha contabilizado decenas de teléfonos de gama media, principalmente de marca Nokia, que fueron entregados a personal de menor rango, sobre todo asesores, y que tampoco han sido devueltos.
La mayor parte de los usuarios de los teléfonos han solicitado el cambio de titularidad de la línea para mantener el número para su uso particular, aunque otros han pedido la baja de la línea.
EL PSOE HABLA DE ‘RUINDAD’
La exigencia del nuevo Ejecutivo castellano-manchego, controlado por los populares, no ha gustado nada en las filas socialistas.
La secretaria de Comunicación del PSOE de Castilla-La Mancha, Esther Padilla, dice que en el PSOE no tienen ningún problema en devolver los móviles, pero alega por si cuela que en su momento les dijeron que eran para uso personal y nadie devuelve nada.
«Los vamos a devolver y Cospedal no tendrá excusas para desviar la atención sobre su incompetencia y el desgobierno en el que están inmersos».
Acusa al nuevo Gobierno de Castilla-La Mancha de «engañar» a los que fueron altos cargos en el anterior Ejecutivo regional y de montarlas con los teléfonos una «encerrona».
«Quieren desacreditar a quien ha servido con lealtad y honradez a Castilla-La Mancha».
Y añade sin sonrojarse:
«Nos dijeron que no era necesario que se devolvieran los teléfonos ya que habían sido entregados gratuitamente por las compañías telefónicas, a través del programa de puntos y sin ningún coste para la administración pública».
NO SON BIENES PARTICULARES
Lo que está claro es que ninguno de ellos recibío el smarthphone por otro motivo que el cargo que ocupaba.
Cierto que el PP de Castilla-La Mancha les está apretando las clavijas, pero suena a despropósito que el secretario de Organización del PSOE, José Manuel Caballero, califique de «ruindad» la petición del Gobierno Cospedal,
Caballero acusa al gobierno autonómico popular de intentar tapar «su incompetencia, inoperancia e inmadurez política» con la jugada de exigir a ex altos cargos socialistas que devuelvan los smartphones.
El dirigente socialista dice que el envío de estas cartas no es más que «una cortina de humo»:
«Los teléfonos no los compró el Gobierno regional, sino que fueron entregados por compañías telefónicas de forma gratuita».
«Los diputados regionales reciben teléfonos de las Cortes y nadie les obliga a devolverlos cuando cesan».
Puede que sea así, pero Caballero, Padilla y el resto d elos altos cargos de Barreda , que tan prestos han estado a la hora de llevarse a casa los carísimos teléfonos y tabletas que no son suyos, podrían haber incurrido en el delito de cohecho impropio, por el simple hecho de recibir ese tipo de regalos, sobre todo cuando reivindican que no son bienes públicos sino regalitos para ellos.
Comentar desde Facebook