Al ministro Blanco le están dando dosis serias de su misma medicina
El presidente Zapatero escogió este 31 de octubre de 2011 Lugo, precisamente, para arropar al ministro de Fomento, José Blanco, en uno de los escasísimos actos electorales en los que podrá vérsele antes de que abandone La Moncloa.
Ni uno ni otro hicieron la más mínima mención al caso Campeón, en el que un empresario acusa al número dos del PSOE de cobrar comisiones en metálico a cambio de favores.
Ambos se fundieron en un abrazo en el escenario tanto al principio como al final del acto, y el presidente proclamó que Blanco es el ministro «que más ha hecho por Galicia», momento en el que el auditorio, con más de 1.500 personas, se puso en pie.
Desde Santiago de Compostela, la cúpula del PP pidió -especialmente María Dolores de Cospedal que se permitió hasta ironizar sobre el ‘caso Campeón’- que el también portavoz del Gobierno renuncie a ir en las listas para las próximas elecciones generales del 20-N.Blanco no explicó en el mitin de Lugo, ni ha explicado en sitio alguno porque su táctica es el silencio, por qué su primo estaba en la gasolinera en la que recibió al empresario que le acusa de cobrar comisiones ni por qué hasta ahora ocultó su presencia.
A lo único que se limita es a repetir como un mantea: «No hay caso ni lo habrá».
Pero eso es encastillarse para negar la evidencia. El caso existe porque hay gravísimas apariencias de tráfico de influencia y de nepotismo. Blanco dice que dentro de un tiempo el asunto «quedará clarificado».
Al presidente Camps, de quien no conocemos ni el color de los trajes que dicen que recibió como regalo, le hubiera gustado que el número dos del PSOE hubiera tenido con él la misma comprensión que la que ahora reclama para sí.
Para desgracia de Blanco y aunque suene cruel, lo que valía en su día para el ex presidente valenciano sirve para él.
Una cosa son las posibles consecuencias judiciales de su actuación y otra muy distinta las responsabilidades políticas. Blanco basa su defensa en que Dorribo miente pese a que presenta el rastro de los 200.000 euros que dice que pagó por la entrevista.
Eso equivale a acusarle de preconstituir pruebas, algo poco creíble pues en esas fechas el empresario desconocía que acabaría ante un tribunal.
Los populares sacaron este 31 de octubre toda su artillería y Cospedal subrayó que si Blanco fuera del PP «hoy no sería candidato».
Pero Zapatero arropó en un mitin en Lugo a su ministro. Qué triste que aquella Nueva Vía de la regeneración haya desembocado en una oscura gasolinera.
ZAPATERO Y LOS PARADOS
«Cuando me dijeron que había un mitin en Lugo, pensé: ‘Yo quiero estar ahí», dijo Zapatero, que se refirió a Blanco como «un ministro en plena forma» y el responsable de importantes avances en infraestructuras.
El presidente admitió que se siente «el principal responsable» de los casi cinco millones de parados, «de todas las personas que viven en la desesperanza, la inquietud y el temor ante la falta de trabajo».
«Me enseñasteis a dar la cara y voy a asumir mis responsabilidades hasta el último minuto»