El líder de CiU en el Parlament e hijo de Jordi Pujol, Oriol Pujol (número dos de Convergència), amenazó al nuevo Gobierno de Mariano Rajoy (PP) que si sigue «sin querer ni siquiera hablar» sobre el concierto económico para la Generalidad, los nacionalistas tomarán medidas al margen de la ley y la democracia.
Pujol, en declaraciones a RAC1 (la emisora de radio del Grupo Godó), advirtió a los populares que si no ceden a la propuesta de la Generalidad se plantearán una consulta popular, al margen de la ley —Mas prepara un fraude de ley para plantear sondeos separatistas–, o un cierre de cajas, como el que se llevó a cabo por algunas empresas en Cataluña a finales del siglo XIX.
«No nos encontrarán tirando la toalla, sino al contrario», señaló el dirigente de CiU, aunque también dejó sentando que, si se llegan a realizar estas medidas —Cataluña amenaza a Rajoy con una consulta popular sobre el pacto fiscal si no atiende su reclamación–, se harán de una forma firme y con amplios consensos detrás para evitar tener que «dar marcha atrás en ningún paso».
DOS OPCIONES INVIABLES
Las dos decisiones son prácticamente inviables. La consulta popular, no solo porque trataría de una competencia que no pertenece a la Generalidad, sino porque la última experiencia de un referendo en Cataluña fue la del Estatuto de Autonomía, con todos los partidos políticos haciendo campaña, y solo llevó a las urnas al 49% del censo.
En cuanto al cierre de cajas, solo hace falta conocer cómo funciona el mercado monetario y financiero actual, a nivel internacional, para comprobar que es en la práctica casi imposible; y de unas consecuencias impredecibles (imagen internacional, salida de capitales, negativa de las empresas a invertir…).
El líder de CiU en el Parlament, sin embargo, defendió que una consulta popular supondría «un mensaje inequívoco» hacia el resto de España sobre que la demanda del pacto fiscal, en el lenguaje de los nacionalistas, es secundada por la mayoría de los catalanes y trasciende a unas siglas y a los partidos.
MUCHO «RUIDO» PARA DESVIAR LA ATENCIÓN
Las declaraciones y amenazas de Pujol no obtuvieron respuesta por parte de miembros del Gobierno. Sí lo hizo, desde su blog, el diputado autonómico del PSC Joan Ferran, muy dado ha enzarzarse con el político de CiU, así como con Josep Antoni Duran i Lleida, portavoz de los nacionalistas en el Congreso.
En un apunte en su blog —Les aventures del jove Pujol (Las aventuras del joven Pujol)–, Ferran considera que las palabras de los nacionalistas suenan a «cancioncilla vieja, método antiguo» y «discurso gastado».
Para el ex dirigente del PSC y actualmente diputado autonómico, las palabras del político nacionalista suenan a «ruido» para intentar «animar al personal» y que la atención de la prensa no caiga sobre los «recortes sociales» que está tomando CiU al frente de la Generalidad.
Así, Ferran recuerda que el «joven» político «audaz» no hace mucho recordaba el paralelismo que, desde su punto de vista, existía entre Artur Mas (CiU), presidente autonómico, y Francesc Macià para encontrar «la tierra prometida».
Pero «ay! Dios mío!!» –escribe Ferran-, no hay tierra prometida «idílica» en la que no exista la crisis, «ni las presiones internacioles», ni «mercados bondadosos, patriotas ni mudos», advierte finalmente el socialista.