María Zambrano Alarcón (Vélez-Málaga 1904- Madrid, 1991) es un jalón importante y original en el pensamiento europeo del siglo XX, aunque aún sea bastante desconocida y poco entendida en su originalidad extraordinaria. La publicación de sus Obras Completas va a significar un paso de gigante para su comprensión completa y valoración exacta. ‘He aceptado siempre la verdad, me lleve donde me lleve, me traiga lo que me traiga; entonces mi autobiografía, ¿cuál podría ser?; pues todo, todo aquello que he dado y también lo que he querido dar y no he podido. Una autobiografía al par positiva y negativa’.
Serán seis gruesos volúmenes, el primero de los cuales fue presentado ayer. Se ha comenzado por el volumen tercero porque constituye el núcleo básico de su pensamiento, los siete libros publicados entre 1955 y 1973, ‘hitos en el camino hacia su plena madurez’. ‘El hombre y lo divino’ destaca entre todos ellos, y en medio de sus dos ediciones se sitúan los demás: ‘Persona y democracia’ (1958), último libro «político» de Zambrano; ‘Los sueños y el tiempo’, una síntesis de su investigación sobre los sueños que se prolongará en ‘El sueño del creador’, que aplica sus teorías de los sueños a los géneros literarios, esencialmente la tragedia, la novela y la confesión; ‘La España de Galdós’ y ‘España, sueño y verdad’, muy relacionados entre sí como continuación de Pensamiento y poesía en la vida española (1939, vol. I), y finalmente ‘La tumba de Antígona’, que condensa los temas nucleares de su razón poética.
Zambrano fue un raro ejemplo de mujer intelectual dedicada a la filosofía y el pensamiento. A la influencia de Ortega añadió una impronta espiritual que desafía el predominio empirista-racionalista. A la espesura conceptual de los especialistas contrapuso un lenguaje riquísimo y una capacidad poética que impregna todos sus escritos de un atractivo especial, el del uso deslumbrante del idioma español. El exilio y las dificultades materiales le impidieron un trabajo sistemático pero le proporcionaron una perspectiva vital que enriqueció su dispersa obra, una sinfonía incompleta que parecía condenada al olvido pero que sin embargo está resucitando con imparable empuje gracias a una misteriosa y providencial mezcla de azar y destino.
Estas Obras Completas aspiran a ser un canon definitivo sobre el que puede erigirse el estudio colectivo que su obra merece, como lo han sido las Obras Completas de Ortega en Taurus, siguiendo la estela y el ejemplo de lo que supuso el trabajo de sistematización de Giorgio Collin y Mazzino Montinari en la obra de Nietzsche.
El director del proyecto, Jesús Moreno, que fuera colaborador de Zambrano en los últimos años de su vida, considera que este tercer tomo es el libro nuclear del conjunto, y que dentro del mismo, ‘El hombre y lo divino’ es la piedra angular. A María le costaba mucho corregirse y de ello se han derivado los problemas más importantes de la edición, la fijación del texto. ‘Hasta ahora estamos leyendo mal a Zambrano, con erratas, con omisiones. Menos mal que preservó muchos manuscritos y todo ello ha podido ser subsanado’. Así, se ha realizado una edición crítica cuyo primer objetivo ha sido la fijación de los textos que subsanase los errores y omisiones que contenían sus anteriores ediciones, por primera vez depurados, tal como los concibió su autora.
Moreno creo que de estas Obras Completas va a emerger una Zambrano diferente, que no va a gustar a algunos, una pensadora profundamente espiritual, que rezaba todos los días y lo hacía al espíritu santo, que puede considerarse pasarela entre mística y filosofía izada sobre su razón poética.
Su obra son los restos de un naufragio. Se le ocurría un libro cada día. Su pensar es un gran ‘fracaso’, como le ocurriera a Nietzsche, incapaz de fundir tantas ocurrencias en un corpus sistemático. Esta impresión quedó de la multitudinaria presentación (¡ocho ponentes!) de estas Obras Completas.
María Zambrano Alarcón, discípula de Ortega y Gasset, forma parte de la denominada «Escuela de Madrid», comienza a publicar artículos en 1928 y su primer libro (Horizonte del liberalismo) lo es en 1930. Opta por el exilio, y entre 1939 y 1953 impartirá enseñanza en México, Cuba y Puerto Rico, prosiguiendo su obra con títulos como Filosofía y poesía (1939), La Confesión (1943) o Hacia un saber sobre el alma (1950). En Roma se instalará entre 1953 y 1964, período en que realizará su investigación sobre los sueños, adentrándose ya en su distintiva razón poética. En 1964 se retira, junto a su hermana Araceli, a La Pièce, en el Jura franco-suizo, donde ya va perfilando sus escritos esenciales. Tras breve estancia entre 1978 y 1979 en Ferney-Voltaire, se traslada a Ginebra. En 1984 regresa a España hasta su muerte el 6 de febrero de 1991, época en que va componiendo sus libros finales -como De la Aurora, Notas de un método o Los Bienaventurados- y se ve rodeada de beatería y adulación bastante penosas.
Fue un filósofo poeta, un pensador trascendente, un brote de la síntesis emergente que pugna por superar el racionalismo.
‘Filosófico es el preguntar y poético el hallazgo’.
‘La filosofía es una preparación para la muerte y el filósofo el hombre que está maduro para ella’.
En su pueblo quieren crear algo titulado ‘La ciudad del pensamiento’ en su honor, y unos premios internacionales a la igualdad de género presididos por la princesa Leticia con el formato que mantienen los que llevan el título de su consorte.
María Zambrano, Obras completas
Galaxia Gutenberg / Círculo de Lectores, 2012
1.536 pp., 35€
Con la colaboración de Gobierno de España – Ministerio de Cultura, y Junta de Andalucía – Consejería de Cultura
Edición dirigida por Jesús Moreno Sanz
con la colaboración de Sebastián Fenoy Gutiérrez, María Luisa Maillard García, Fernando Muñoz Vitoria y Virginia Trueba Mira
Volumen III
(1955-1973)
El hombre y lo divino
Persona y democracia
La España de Galdós
España, sueño y verdad
Los sueños y el tiempo
El sueño creador
La tumba de Antígona
PLAN DE LA OBRA
I Libros (1930-1950)
II Artículos e inéditos (1928-1950)
III Libros (1955-1973)
IV Artículos e inéditos (1951-1973)
V Libros, artículos e inéditos (1974-1991)
VI Escritos autobiográficos (1926-1990)
