Su señoría Estela San José, calificada ya por algunos medios como nueva estrella mediática en el panorama jurídico nacional, se ha ganado a pulso la reputación de martillo de los corruptos.
Paciente, meticulosa e inflexible, cuando le hinca el diente a un caso no se le escapa ni una sola pieza. Prefiere pecar de imputados por exceso que por defecto. Prefiere presunto inocente en mano que cientos de presuntos culpables volando, y debe ser la magistrada más rápida del oeste español enviando citaciones para declarar ante el Juzgado nº 3 de Lugo. — La instructora de la ‘Operación Campeón’ vuelve a ampliar el secreto de sumario —
El siguiente, pero no el último, es el alcalde de Lugo, Xosé Clemente López Orozco, que apenas disfrutó de 24 horas para celebrar su recién estrenado cargo de primer Presidente del Partido de los Socialistas de Galicia. — El alcalde socialista de Lugo también imputado en el ‘caso Campeón’—
Imputado por presuntos indicios de prevaricación, según una citación fechada el día nueve de marzo de 2012, el propio alcalde-filósofo o viceversa, según la circunstancias, se lo comunicó en persona a los medios de comunicación y aprovechó para hacer una confesión que ha dejado volar la imaginación en las redacciones de prensa, de emisoras de radio y de televisiones gallegas:
Supongo que la citación estará relacionada con la declaración de Dorribo sobre la licencia de la nave de Nupel. Lo que espero es que sean citados todos aquellos a los que ha mencionado
Dorribo.
«¿También Feijóo?», puntualiza una periodista.
Absolutamente todo el mundo, ustedes ya me entienden.
Pero, que no se hagan ilusiones los morbosos. Aún en el caso de que su señoría Estela San José se diese por aludida ante las sugerencias del alcalde de Lugo, nunca podría protagonizar la escena cumbre de citar al Presidente de la Xunta para prestar declaración en su juzgado.
Parece una utopía hallar indicios de algo en una entrevista pública y notoria del empresario Dorribo con el máximo representante de la Xunta. Un despacho oficial no es precisamente una gasolinera. E incluso en el caso improbable de que la sagacidad de la señora jueza le permitiese vislumbrar gigantes, en vez de prosaicos molinos de viento, un Feijóo hipotéticamente imputado pasaría a la jurisdicción del Tribunal Superior de Justicia de Galicia.
No es la primera maniobra de distracción que utilizan dirigentes socialistas para incitar a los medios de comunicación gallegos a practicar la ‘caza mayor’.
Pero por mucho que los detractores de la titular del Juzgado nº 3 de Lugo la tilden de excesivamente mediática, los que la conocen afirman que es estricta e independiente. No deja ningún cabo suelto, pero tampoco se pilla los dedos con sobreactuaciones que puedan dejarla en evidencia profesional.
DESDE LUGO PARA EL MUNDO
Estela San José, una vallisoletana de 38 años que ejerce en Lugo desde hace 6 años, está etiquetada como próxima al PP por una de esas dos Españas obsesionadas con etiquetarlo todo: «o estás con nosotros o estás contra nosotros».
Por lo visto perteneció a la Asociación Profesional de la Magistratura, presunta ala conservadora del colectivo de jueces españoles, y esa coletilla le acompaña siempre que un progresista intenta desacreditarla sutilmente (ese vicio nacional que también se practica en dirección contraria) para practicar la equidad a la hora de impartir justicia.
El caso es que ha convertido a la ciudad de Lugo en capital mediática de España. Desde Lugo salen todas las ramificaciones de la «Operación Campeón» que acaba de cobrarse en Cataluña otra pieza de caza mayor: el hijo de Jordi Pujol.
Ha sido involuntaria protagonista de la caída política en picado de Pepe Blanco, de la dimisión como parlamentarios de un ex conselleiro del BNG y de un diputado del PP gallego, del cese del máximo responsable del IGAPE (organismo de la Consellería de Economía de la Xunta), de un amargo trance para el rector magnífico de la Universidad de Vigo, probablemente de la victoria de Pazchi Vázquez y la derrota de Elena Espinosa, en un Congreso del PSdG que despedía cierto olor a gasolina, y de un próximo paseo del alcalde de Lugo desde el Ayuntamiento hasta las dependencias de los juzgados, el próximo 23 de marzo, para acudir a una cita como imputado por un presunto delito de prevaricación.
En Lugo se acuestan todas las noches preguntándose: ¿quién aparecerá mañana como nuevo imputado? La «Operación Campeón» empieza a hacerle la competencia desleal a los culebrones televisivos de máxima audiencia.