Una mujer ha fallecido este viernes 4 de mayo de 2012 por arma de fuego, en un atraco ocurrido en la sucursal que Caja Rural Castilla-La Mancha tiene en la localidad toledana de Santa Cruz de Retamar.
Según han informado a Efe fuentes de la Guardia Civil y del municipio, la fallecida trabajaba como limpiadora de la entidad, aunque su identidad aún no ha sido facilitada.
Los bandidos han entrado justo a las ocho de la mañana, cuando la mujer comenzaba sus labores.
La Guardia Civil ha detenido a uno de los tres participantes en el intento de atraco, en el que ha fallecido Mercedes, que trabajaba en la limpieza de la oficina.
ATRACO A LAS 8
Una mañana más, las tres empleadas de la sucursal de Caja Rural de Castilla-La Mancha acudían a su puesto de trabajo, acompañadas en esta ocasión del director territorial de zona, que visitaba la oficina.
Allí les aguardaban tres individuos con la cara tapada, que a punta de pistola, les introdujeron en una sala. Mientras estaban siendo amordazados, los empleados de la caja oyeron un disparo.
Así lo ha relatado a Efe Javier Rodríguez, responsable de prensa de la entidad financiera, antes de que el juez decretase el secreto de sumario.
Rodríguez ha agregado que todo apunta que los ladrones se habían dado a la fuga sin parar a coger dinero.
Las fuerzas de seguridad han desplEgado un fuerte dispositivo en la zona para encontrarlos y horas después han detenido a uno de ellos, pero la Guardia Civil no ha precisado el número de personas que han participado en el asalto.
Mercedes, de 64 años, estaba casada y tenía una hija de 34 años. Era natural de Santa Cruz de Retamar, localidad a 59 kilómetros de Madrid, y trabajaba a través de la empresa Eulen en la misma sucursal en la que lo había hecho su madre.
