El titular del Juzgado de Instrucción número 22 de Barcelona, Juan Emilio Vilá Mayo, ha citado a declarar como imputados al hasta ahora presidente de la fundación de gestión del Hospital de San Pablo, Albert Folia, y al administrador de turno de la fundación patrimonial del centro por la denuncia de presuntos delitos de fraude, malversación de fondos y un delito contra los trabajadores.
Así lo señala el juez en el auto, dado a conocer este martes 29 de mayo de 2012, en el que el togado admite la denuncia presentada por la Asociación Profesional de Enfermería (API) a mediados de este mes.
Además, la doctora Carmen Pérez también ha denunciado a los dos altos cargos de la fundación por consentir una «arquitectura fraudulenta» entre las distintas fundaciones del hospital, al que acusan de pagar nóminas e indemnizaciones irregulares a ex altos cargos públicos y patronos.
El juez alega presuntos delitos societarios, de estafa procesal y malversación, y se dirige al hasta ahora presidente del patronato de la fundación y el administrador de turno de la Muy Ilustre Administración (MIA), entidad integrada por el Arzobispado de Barcelona, el Ayuntamiento de Barcelona y la Generalidad de Cataluña.
El texto recoge parte de los objetos de una denuncia presentada ante la Oficina Antifraude de Cataluña y se señala la existencia de retribuciones económicas a patronos y retribuciones económicas a ex altos cargos de la Generalidad de los que los trabajadores señalan que se desconoce el trabajo encomendado.
SUELDOS POR NO TRABAJAR
A mediados de este mes de mayo de 2012 se supo que el Hospital había estado pagando durante más de siete años el sueldo al ex gerente adjunto Ricard Gutiérrez Martí (entre 80.000 y 110.000 euros anuales) a pesar de que ya no trabajaba en el centro sanitario. A estas cantidades había que sumar una indemnización cobrada en 2011 por valor de 158.569,63 euros, cuando finalmente se formalizó su despido.
Gutiérrez Martí, en la órbita del PSC, es un peso pesado de la sanidad pública nacional. Es vicepresidente de la Organización Médica Colegial (OMC) en representación del Colegio de Médicos de Barcelona y director de una cátedra en gestión sanitaria de la Fundación Doctor Robert, dependiente de la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB). También ha ocupado cargos directivos en el Ministerio de Sanidad, el Ayuntamiento de Barcelona y la Cruz Roja.
En 2001, fue nombrado mano derecha del entonces gerente del Hospital, Joaquim Esperalba, y dejó sus funciones a principios de 2004. Sin embargo, en abril de 2011, representantes sindicales tuvieron acceso al censo de la plantilla y descubrieron que Gutiérrez Martí seguía constando como «gerente adjunto» con una antigüedad de 121,55 meses.
Un mes más tarde, tras hacerse pública esta irregularidad, fue despedido oficialmente, previo pago de la citada indemnización. La noticia ha generado un profundo malestar entre los trabajadores del Hospital, que en marzo de 2012 fue intervenido por el Gobierno autonómico para reflotarlo tras acumular un agujero patrimonial de entre 18 y 30 millones de euros y sufrir un importante ajuste presupuestario y salarial.
SOBRECOSTE DE 77 MILLONES DE EUROS
Sin embargo, los problemas de uno de los hospitales más importantes de Barcelona, y de Cataluña, no acaban aquí. Según ha desvelado El País, la construcción de las nuevas instalaciones (en varios casos con contratos adjudicados a dedo) del Hospital, en marcha desde 2000, parcialmente, y a pleno rendimiento, desde 2009 supuso un rosario de modificaciones, errores y retrasos cuyo resultado se resume en una cifra: 77 millones de euros.
La desviación es del 35%, desde los 216 millones previstos hasta los 293 millones de euros, y ya se acumulaban en 2005. La cifra hubo que contenerla, pero no reducirla, con drásticas medidas de corrección y moderación de gastos, incluido -según los informes- el uso de materiales de calidad inferior a la prevista inicialmente para un hospital en el que todo empezó a lo grande.
