La Empresa Municipal de Aguas y Alcantarillado tendrá este año unos beneficios de seis millones
Las facturas no perdonan a nadie. Si hace poco se conocía el dato de que en lo que va de año más de 2.500 familias han sido desahuciadas en Baleares por no poder pagar la hipoteca, ahora sale a la luz el escalofriante dato de que a 70 familias de Palma se les cierra el contador del agua cada día. Los afectados no pueden hacer frente a los recibos, ahogados por la crisis económica.
El dato, al que ha tenido acceso este digital, obliga al grupo municipal PSIB-PSOE a presentar en el próximo pleno del día 25 una proposición para que se bajen las tarifas de Emaya, que como se recordará ya se ha anunciado que volverán a subir en breve. Consideran que una empresa municipal como ésta, que facturará este año cerca de seis millones de euros, no tiene por qué cobrar más. Si lo hace, advierten los socialistas, se llegará a cortar el grifo a los ciudadanos «en una media muy superior».
ESTAFA FISCAL
En la proposición que se presentará en la citada fecha en el pleno del Ayuntamiento se acusa directamente a Mateo Isern, alcalde de Palma, de haber cometido «una estafa fiscal a los ciudadanos» porque, «de todas las promesas fiscales que hizo, ha hecho precisamente todo lo contrario». Califican así la subida del agua de «una locura que, como siempre terminaremos por pagar todos los ciudadanos».
En el pleno el grupo socialista pedirá por otra parte no incrementar el precio del billete de los autobuses de la EMT. A este respecto se argumenta que el aumento en el coste de un 23% «ya ha repercutido muy negativamente en el número actual de pasajeros, «por lo que es injustificable aplicar una nueva subida para 2013 y los próximos años de legislatura, lo que va a repercutir, también, en los ingresos de la Empresa Municipal de Transportes».
Se abogará, finalmente, para que no se incrementen las tarifas funerarias de la EFM, que pueden subir en poco tiempo en un porcentaje del 21%.
