Nunca ha tenido intención de introducir el castellano como lengua vehicular en la enseñanza
«A pesar de declaraciones y poses, en la práctica el PP apuesta claramente por la inmersión lingüística y se olvida de la libre elección de lengua en el ámbito de la educación. El caso de Sonia Palma y sus hijos es un ejemplo sangrante de sus efectos más perversos».
Así se expresa Unión, Progreso y Democracia (UPyD) que entiende que son incompatibles las huecas declaraciones de libre elección de lengua en la enseñanza del conseller Bosch con la aprobación de una moción en el Parlament en que se apoya el mantenimiento de los proyectos lingüísticos de los centros educativos públicos de Baleares, todos ellos defensores de la inmersión lingüística.
«Una vez más el PP demuestra que la cabra tira al monte», afirma Juan Luis Calbarro, portavoz de UPyD en Baleares
La formación magenta considera así que «nunca ha tenido intención de introducir el castellano como lengua vehicular en la enseñanza, más allá de altisonantes declaraciones en vísperas electorales. Cañellas introdujo las bases de la inmersión lingüística, Matas la asentó con su decreto de mínimos y Bauzà y Bosch pretenden grabarla en mármol para la eternidad».
UPyD sostiene que en educación el PP es en la práctica tan nacionalista como el PSOE y el PSM. «Es por eso que intentos loables y extremos como los de Sonia Palma, que pretende, con el apoyo de especialistas en trastornos de aprendizaje, una educación en castellano para sus hijos con problemas, acaben estrellándose contra la pared monolítica, dogmática y conservadora de la inmersión lingüística.»