Decenas de manifestantes, con pancartas de sindicatos anarquistas, irrumpieron este 31 de octubre de 2012 en una tienda de Apple en el Paseo de Gracia de Barcelona así como en otro local del grupo español Zara, líder mundial del sector textil, en Barcelona durante una protesta contra las políticas de austeridad.
Al término de una concentración convocada por los sindicatos anarquistas CNT y CGT, una veintena de personas forzó la entrada en los locales que tiene Zara en el centro de la ciudad, rompiendo algunos cristales y arrojando al suelo estanterías.
Tras su paso, el comercio parecía el escenario de una batalla campal, con maniquíes, ropa y zapatos esparcidos por el suelo.
«Se trata de algunos alborotadores que huyeron en cuanto vieron la presencia policial», declaró un portavoz de la CGT, restando importancia a los incindentes.
«Nosotros condenamos estos hechos», afirmó, precisando haber convocado una marcha durante la tarde «para manifestar el descontento contra los recortes sociales, el desempleo, la precariedad y la marginacion social, dictados por la banca y ejecutados por la clase política».
Barcelona vivía además el miércoles una nueva huelga de transporte público, la décimo sexta en el último mes, aunque en esta ocasión sólo afectó a los ferrocarriles de cercanías y al metro, con servicios mínimos del 33% entre las cinco de la mañana y las dos de la madrugada del jueves.
Una treintena de personas han sido identificadas durante la jornada de huelga convocada por la CGT y CNT por pintadas y destrozos en comercios del centro de Barcelona, ha informado la policía catalana.
Los agentes han identificado a ocho personas por hacer pintadas en la estación de Sants, y otras siete por pincharle una rueda a un taxista en la Estació del Nord; finalmente, una persona ha sido imputada por pintadas.
Al mediodía, un grupo de individuos, algunos encapuchados, han irrumpido en el Zara de paseo de Gràcia con banderas del sindicato y han tirado al suelo a maniquíes y prendas de ropa, además de causar destrozos; en el centro de la ciudad se han hecho numerosas identificaciones por la acción de los piquetes en varios comercios.
El portavoz de CGT-Barcelona, Carlos Navarro, ha restado importancia a los incidentes y ha asegurado que lo importante es el éxito que, según él, ha tenido la huelga.
Navarro ha considerado que más violento que la irrupción de algunos piquetes en establecimientos comerciales del centro de Barcelona como Zara y Fnac son «los contratos basura» que, a su juicio, ofrecen estas marcas.
Además de su apoyo a la huelga de los trabajadores de Metro y Renfe, la CGT ha convocado esta tarde una marcha que comenzó en Arc del Triunf y ha acabado en los Jardines de Gràcia pasadas las 20 horas.