España es como un socio de empresa, que ni paga ni cumple
Artur Mas ha admitido este 7 de noviembre de 2012 que repensará su estrategia si es «absolutamente imposible» que una Cataluña independiente siga perteneciendo a la Unión Europea.
El presidente de la Generalitat y candidato de CiU a la reelección ha insistido, sin embargo, en el derecho de los catalanes a pronunciarse en una consulta.
Mas, afirma que no descarta convertir en una convocatoria electoral la consulta soberanista que quiere llevar a cabo, como último recurso si este objetivo fracasa mediante los marcos legales dentro y fuera de Cataluña.
«Hasta en el último momento se puede transformar una convocatoria electoral en un referéndum, aunque no sea la palabra estricta de referéndum. No descarto nada dentro de la legalidad. La consulta debe hacerse».
Mas hablabla este miércoles en rueda de prensa en la sede del Gobierno catalán en Bruselas, tratando de explicar a los periodistas su proyecto soberanista, anterior al encuentro que mantendrá con el think thank ‘Friends of Europe’.
Ha repetido que, si fracasa la negociación con el Estado, si le rechazan también una eventual ley de consultas catalana y no encuentra amparo en la UE, siempre puede recurrir a convertir una convocatoria electoral en una consulta:
«Por eso digo que la consulta se hará, por una vía legal u otra, o por unas cuantas».
Guiño a Europa
El candidato de CiU a la reelección ha emplazado este miércoles a Europa a que «no falle» a Cataluña en su voluntad de ser un Estado propio, y a avanzar hacia una realidad más federal para construir unos ‘Estados Unidos de Europa’.
«Cataluña no ha fallado nunca a Europa en toda su historia. Esperamos que ahora Europa no nos falle».
Todo ello a dos días de empezar la campaña electoral catalana.
Las herramientas
El president de la Generalitat está decidido a llegar hasta el final con su consulta soberanista, sea, si el Estado rechaza la vía del referendo o la ley catalana de consultas, con la celebración de unas elecciones plebiscitarias
«Cuando digo que se hará la consulta sí o sí, no quiere decir fuera de la ley, puede ser por una vía legal o por unas cuantas. ¿Se puede transformar una convocatoria electoral en un referendo? No descarto nada dentro de la legalidad porque la consulta se ha de hacer, este sí que es un compromiso rotundo».
«España solo chilla»
Mas afirma que en vez de dialogar, «en España, de momento solo se chilla», al tiempo que señaló que algunas voces de Madrid hacia su proyecto soberanista «no son especialmente amables».
Este martes, Artur Mas afirmó que «España es como un socio de empresa, que ni paga ni cumple«.
Hoy el Partido Popular catalán ha acusado a Artur Mas de querer «disparar la prima de riesgo española» con su viaje a Bruselas.
El infierno
Preguntado sobre las declaraciones del ministro español de Asuntos Exteriores, José Manuel García Margallo, en las que señalaba que una Cataluña independiente quedaría fuera de la UE, Artur Mas consideró que «es un poco fuerte dictar sentencias sin escuchar antes la voz del pueblo».
El presidente de la Generalitat catalana se preguntó si «se puede gobernar para siempre sin escuchar la voz y el anhelo de los ciudadanos».
«¿Por qué no sentarnos y dialogar? Hay una forma civilizada de hacer las cosas que es la democrática. Antes de decirnos que nos iremos al infierno que escuchen al pueblo catalán el próximo 25 de noviembre».
El presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, afirmó el martes en Madrid que agotará «todas las posibilidades de diálogo» con el Gobierno catalán, aunque «sin imposiciones y planteamientos».
Respecto a los comicios del próximo 25 de noviembre en su comunidad autónoma, Mas afirmó que será necesaria «una mayoría holgada» para que el futuro gobierno catalán tenga legitimidad para convocar una consulta sobre el derecho a decidir, aunque declinó concretar cuántos escaños serían necesarios para sumar ese consenso.
Cuestión de mayorías simples
«Siempre he hablado de mayorías amplias para sustentar el derecho a decidir».
Mas también indicó que si se consigue ese consenso se reunirá con el resto de partidos del Parlamento catalán para dibujar la hoja de ruta.
Agregó que si le avalan las urnas, la consulta «se hará sí o sí», al tiempo que matizó que «será dentro de la legalidad, en contra de lo que dicen algunas informaciones».
«Nuestro objetivo es poder realizar la consulta en los próximos cuatro años», dijo el presidente de la Generalitat catalana, que también apuntó a que si la vía del referéndum no es posible, intentará la de una consulta en Catalunya previa aprobación de una ley para tal fin por su Parlamento.
«No será fácil. Lo he dicho desde el principio. El camino está lleno de dificultades».
«Una vez que se pronuncie el pueblo catalán democráticamente en las urnas, tanto el Estado como la UE tomen nota».