Al margen de su sueldo la compañía asumía, entre otros gastos, el coste de su vivienda en la capital estadounidense
Iñaki Urdangarin cobraba un sueldo de Telefónica mientras estuvo expatriado en Washington de unos 350.000 euros al año, lo que supone casi un 17 por ciento más de lo que gana el Rey como jefe del Estado.
Así lo desveló el duque de Palma en su declaración ante el juez instructor del caso Nóos, José Castro, el pasado 23 de febrero, a la que ha tenido acceso Europa Press. A preguntas de la Fiscalía, Urdangarin dice primero que no recuerda bien cuánto ganaba como directivo de Telefónica Internacional USA entre los años 2009 a 2012.
Cuando el fiscal le indica que en los medios de comunicación se ha hablado de un salario de entre un millón y un millón y medio de euros, Urdangarin reacciona: «Ni muchísimo menos, yo debía estar cobrando en Washington 350.000 euros».
Al margen de su sueldo, la compañía asumía, entre otros gastos, el coste de su vivienda en la capital estadounidense, como ocurre con «cualquier expatriado de Telefónica», añade el duque.
200.000 EUROS DE FINIQUITO
Urdangarin niega haber cobrado de Telefónica tres millones y medio de euros por la rescisión de su contrato, como se llegó a publicar en los medios de comunicación. Según él, la compañía le «facilitó un dinero para poder volver a España». «No sé si fueron 200.000 euros», indica.
Explica que en la actualidad él y su mujer tienen cuatro cuentas bancarias abiertas en España. Una a su nombre, otra a nombre de su esposa, una tercera conjunta, donde tienen los «gastos comunes de la casa», y una cuarta para la póliza de crédito de La Caixa, entidad que les concedió la hipoteca cuando compraron el palacete de Pedralbes.
El importe global de las tres primeras cuentas «no llegará a 80.000 euros», afirma Urdangarin. De la hipoteca les queda por amortizar 3,6 millones de euros. El duque reconoce que como ahora no tiene ingresos le es «imposible» hacer frente a la póliza, por lo que lleva dos trimestres sin pagar.
A pesar de los impagos, admite que «por el momento» no ha recibido «ningún requerimiento» del banco, a cuyo presidente, Isidro Fainé, conoce personalmente.
Urdangarin afirma que las condiciones de su póliza fueron las que le ofreció la entidad. Entre ellas, figura la posibilidad de no tener que empezar a pagar durante los primeros cuatro años.