Había sido expedientado con anterioridad por la caída de una mujer minusválida en el centro
Vicente R.P., de 42 años de edad, trabajaba en la palmesana Residéncia dels Oms ejerciendo como auxiliar de enfermería.
Alternaba su labor de ayuda a los ancianos con unas palizas de cuidado que les infringía a todas horas, en forma de empujones, bofetadas y agresiones varias de las que en varias ocasiones fueron testigos sus compañeros, que decidieron denunciarle sin más miramientos.
Los agentes del SAF (Servicio de Atención a la Familia) del Cuerpo Nacional de Policía, fueron los encargados de su detención y puesta a disposición judicial.
De momento se está a la espera de recabar información de primera mano en la persona de los ancianos agredidos, muchos de los cuales ya se habían quejado en reiteradas ocasiones, aunque no había pruebas fehacientes que respaldaran sus declaraciones.
El iracundo Vicente había sido expedientado en tiempos a raíz de la sospechosa caída de un anciana minusválida, aunque por entonces no prosperó la investigación al respecto.
Según parece el enfermero de marras llegaba a sujetar a los internos por brazos y piernas, para poder así pegarles con más ahínco si cabe.
Las acusación que pesan sobre él a nivel jurídico es de un presunto delito de malos tratos.