Una secesión siempre es traumática para las dos partes
El expresidente de la Generalitat Jordi Pujol ha dicho este 14 de marzo de 2013 que la independencia de Cataluña también sería «negativa» para España y que uno de los principales problemas que ha provocado la actual situación es que «no hay confianza», porque saber que con quien juegas no hace trampas es «básico«.
El expresidente catalán ha asistido este jueves a la presentación del estudio «La cuestión catalana, hoy», del Instituto de Estudios Económicos (IEE), cuya conclusión es que la independencia tendría consecuencias desastrosas para Cataluña.
Pujol, que ha dicho que no está de acuerdo con todo lo que se ha dicho en la presentación, ha asegurado que una secesión «siempre es traumática» para las dos partes y que la independencia también sería negativa para España.
Ha asegurado que una persona como él, que no ha sido independentista, ahora votaría «sí» en un referéndum sobre la independencia de Cataluña y ha explicado que la situación por la que pasa Cataluña «no es un capricho ni una pataleta».
La actitud no tiene que ver con la crisis
Ha dicho que el cambio de actitud de mucha gente «no tiene nada que ver con la crisis», sino con la sentencia del Tribunal Constitucional que recortó el Estatut y, por tanto, no es sólo un tema económico:
«Expliquénselo a quien se lo tengan que explicar».
Ha señalado que una Cataluña independiente «podría ser perfectamente viable» si se hiciera bien, aunque no sabe decir si lo sería al cabo de una o cuatro generaciones.
Lo que para Pujol no es viable es una Cataluña tal y como dicen que ha de funcionar, como país «disminuido» en su identidad, en su lengua, su cultura, en su empuje económico y en su capacidad de mantener el Estado de bienestar.
Ha animado a los economistas del IEE a que terminen con el estudio que están haciendo sobre las balanzas fiscales, aunque ha dicho que lo leerá «con un punto de desconfianza».