Según va la cosa, le oiremos hablar mucho en las próximas semanas de su partido y quizás también de Toledo
Dicen los que saben de la cosa política que Emiliano García-Page puede pintar mucho en el PSOE nacional en un futuro no muy lejano viendo cómo andan los del puño y la rosa. Si no es como secretario general y como presumible candidato a desbancar a Mariano Rajoy, sí en un puesto importante dentro de la Ejecutiva lo que le daría una proyección importante y mucha atención mediática. Por eso cuando leo sus declaraciones en la prensa de Castilla-La Mancha no siempre, pero muchas muchas veces, el alcalde de Toledo habla en clave nacional, desmonta posibles intrigas palaciegas y se atreve a replicar al mismísimo Patxi López, otro de los candidatos que suenan mucho.
Escribía ayer Luis María Ansón que en el banquillo de los candidatos a sustituir a Alfredo Pérez Rubalcaba se sumaba también José Bono, aunque éste parece que quiere pasar de la política y dedicarse a administrar su millonaria cuenta (¿cómo es posible que un hombre que se ha dedicado en cuerpo y alma a la política de primera línea, ocupando puestos importantísimos tenga esa cuenta corriente?). Por eso Emiliano García-Page administra sus tiempos y sus declaraciones, casi siempre un discurso nacional y muy centrado. Lo que ocurre es que según se estropean las cosas dentro del PSOE, esas declaraciones se hacen más y más cotidianas y se le oye hablar y hablar de candidatos, intrigas y renovación y muy poco de Toledo, ciudad de la que es alcalde porque así lo han querido los toledanos.
Según va la cosa, le oiremos hablar mucho en las próximas semanas de su partido y quizás también de Toledo. Pero según habla cada vez más en clave nacional, a los que criticaban a María Dolores de Cospedal por compaginar la Presidencia de la Junta y la secretaria general del PP les oiremos menos. Eso seguro.
