"Todo fue porque intenté mediar con mi madre para que no le pegara a mi hermano"
Miguel López Bortón ha concedido una entrevista a RB tras haber comparecido ante el juez José Castro en la tarde de este jueves, y haber sido decretada su libertad sin fianza.
Tras haber sido detenido por la Policía Local en la tarde del día anterior tras una violenta trifulca acontecida frente a su domicilio palmesano de la calle Pons i Gallarza, noticia de la que ha dado cuenta con detalle este digital, el hasta hace poco vicepresidente de Nuevas Generaciones de Palma, cargo que dejó el pasado mes de febrero, está más que molesto con su partido.
A juicio del actual secretario de la comisión de asuntos jurídicos del PP balear, y que fuera uno de los candidatos al Senado en 2011, el partido le ha dejado completamente desamparado, limitándose a redactar una nota tras lo acontecido, «sin haberme consultado siquiera, ni darme ninguna oportunidad de escuchar mi versión».
Por esta circunstancia piensa presentar su renuncia como militante del PP este próximo martes, «sí o sí», tras haber formado parte de sus filas durante once años:
«No hay marcha atrás, no es de recibo lo que han hecho. Me han dado la espalda tras mi detención y me voy a dar de baja».
En la misiva enviada a los medios por Nuevas Generaciones del Partido Popular, se da cuenta de que fue cesado de sus cargos el referido mes, en el transcurso del congreso de renovación de la organización juvenil palmesana, señalándose que «los hechos han sido puestos a disposición del Comité de Derechos y Garantías, para que éste, con total libertad y ecuanimidad los analice y dictamine si son motivo de sanción leve, suspensión de militancia o expulsión, y tome las medidas pertinentes».
López quiere dejar constancia de que tiene la certeza de que estas líneas han sido redactadas, «por orden de arriba», desde el Gabinete de Prensa de la calle Palau Reial de Palma «por las personas de máxima confianza del presidente Bauzá».
En su muro de Facebook ya se ha encargado además de darles las ‘gracias’ a aquellos que, por dejadez, miedo, omisión o imperativos diversos, no han movido un dedo por apoyarle, y a los que por ende han cargado aún más las tintas sobre su persona.
LOS HECHOS
Miguel López cuenta que el día de autos, a eso de las tres de la tarde, su hermano intentó salir con su coche del garaje del domicilio familiar encontrándose a otro vehículo estacionado en su vado.
Así, «decidió llamar a la Policía Local para que lo retirase, pidiendo cuando llegaron que le pusieran una multa al propietario. En vez de hacerlo le dijeron que no la ponían porque no les daba la gana, entablándose entonces una fuerte discusión que escuché desde mi casa tanto yo como mi madre. En un momento dado observé cómo uno de los agentes le pegaba con la porra y le asía por las solapas, por lo que decidí bajar a intermediar».
En su versión de los hechos asegura que fue entonces cuando el interpelado arremetió también contra él, «propinándome dos porrazos en la cabeza y otro en las costillas. Uno de los golpes me provocó una fisura en la mandíbula».
ME DIJERON QUE ASÍ ME QUEDARÍA MÁS BLANDITO»
Detenido y trasladado a los calabozos de San Fernando, pasó así un periplo de 30 horas sólo interrumpido por una visita al Hospital de Son Espases, donde asegura se emitió un parte médico dando cuenta de la lesión citada:
«Cuando me llevaban de vuelta al cuartel se dedicaron a dar vueltas con el coche por un camino pedregoso mientras estaba esposado y sin cinturón de seguridad, y a toda velocidad, para que me golpeara, y me dijeron que así me quedaría más blandito».
El joven apostilla que lamenta mucho lo sucedido «no porque haya hecho nada malo, sino porque todo esto puede repercutir en mi carrera de abogado».
Reitera, finalmente, que su decisión de abandonar el PP es firme:
«Lo siento mucho, pero me han decepcionado por completo».