CAMPS SE 'CONFIESA' ANTES DE SUBIR A LA TRIBUNA

Principios y obligaciones, a chirigota en el Parlament balear

Principios y obligaciones, a chirigota en el Parlament balear
Pleno del Parlament Archivo

El pleno del Parlament balear del pasado martes fue fiel reflejo de la dicotomía moral en que se mueven algunos diputados del PP.

‘Escoltados’ por toda la plana mayor de los empresarios de las islas, los ‘populares’ hicieron una vez más el papelón votando a favor de su iniciativa de subir unos  impuestos que crujirán aún más a estos primeros, con las extrañas sonrisas -vaya usted a saber por qué- de Cabrer y Prohens a mano alzada.

El parlamentario Antoni Camps, antes de salir a la tribuna de oradores para defender una postura que suma puntos a Bauzá en su ranking de odios por parte de todos los sectores sociales y circundantes, confesó sin ápice de rubor que «nunca imaginé defender una ley que supone la creación de tres nuevos impuestos», algo que dijo iba en contra de sus principios.

Dejando al margen la gran capacidad política del mentado, la circunstancia se antoja cuando menos extraña y fuera de lugar, aunque deja bien a las claras cómo se las gasta la casta política a la hora de defender sus intereses en detrimento de quien sea.

Mal vamos si las personas que nos representan no están convencidas de sus ideas, y menos si éstas se plasman a fuego sobre personas ajenas que ven así quemadas sus expectativas, y que echan ya más humo de lo normal.

Un gran incendio está en ciernes.

El gran aplauso brindado por la patronal a la izquierda aviva las llamas.

 

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