Afirma que "tengo el mundo en contra mía" y que "soy un desgraciado"
El joven mallorquín de 21 años que fue detenido en Palma el pasado día 23 de octubre, acusado de haber planeado volar la Universidad de las Islas Baleares por los aires con una serie de bombas de fabricación casera ya que quería emular al autor de la matanza de Columbine, sufre «un trastorno paranoide de la personalidad con rasgos psicopáticos».
Así figura en un informe remitido al juez por parte de los especialistas del Instituto de Medicina Legal de Baleares, y del que se han hecho eco los diarios Ultima Hora y Diario de Mallorca.
En las entrevistas con los psiquiatras que se hicieron tras su ingreso en la Prisión Provincial de Palma, donde por cierto afirma sentirse muy a gusto ya que ha hecho amistades con carta con una serie de admiradores, y en especial con una chica, Juan Manuel Sierra dejó claro que se sentía «perseguido».
«TODOS ME PUTEABAN»
Así, afirmó que «tengo el mundo en contra mía» y que «soy un desgraciado», recordando con amargura que fue víctima de bullying cuando asistía a clase y que se llevaba muy mal con su padre: «Todos me puteaban».
Sobre sus intenciones de sembrar de bombas el recinto estudiantil, nada más lejos de ser un farol que colgó en una página web que fue leída y denunciada desde Japón por un periodista uruguayo que lo denunció, si no que, al considerarse «una víctima», tenía por ello que «devolver el golpe y hacer daño».
Los médicos concluyen que «no se trata de un enfermo mental, pero padece un trastorno de personalidad que precisa un inmediato tratamiento psicoterapéutico, que le ayude a afrontar los problemas de conducta y los desajustes sociales que sufre», recalcando que sufre además de depresión «por escasas perspectivas de futuro».
Otro informee aportado a la causa, elaborado por especialistas en explosivos, los Tedax, concluye que el nitrato de amonio incautado al joven «posee propiedades explosivas bajo determinadas condiciones, tales como mezclarlo con algún combustible».