Se les arrodilla con los ojos vendados y tras escuchar la condena caen abatidos uno tras otro
La guerra en Siria toma derroteros cada vez más escabrosos. Los insurgentes pertenecientes a la agrupación radical islámica Al Nusrah es la rama más peligrosa, y no se cortan para nada a la hora de subir a las redes sociales los vídeos que dan fe de sus ‘hazañas’.
Si hace escasos días uno de ellos se convirtió en un fenómeno viral con la escenas de un rebelde abriendo en canal a un soldado y comiéndose su corazón: «Juro que nos comeremos vuestros corazones e hígados», ahora se hace lo propio con otro donde aparece en toda su crudeza una ejecución de once soldados fieles al Gobierno de Bashar Al Assad.
En la escenas puede verse como los ejecutores leen la condena al grupo de personas que permanecen arrodilladas con los ojos vendados y a quienes, tras el grito de ¡Alá es grande!, se les descerraja un tiro en la cabeza.
El objetivo que persigue este grupo armado es crear en Siria un Estado islámico regido por la ley coránica, aunque sus acciones lo único que han logrado hasta el momento es levantar la indignación, amén de los internautas, del presidente del país y de algunos opositores.