El IBI le va a explotar en la cara al alcalde de Toledo, Emiliano García-Page. No se sabe si mientras siga siendo regidor o como candidato a algo, pero le va a explotar porque lo que se ha gestado en Toledo es un escándalo con mayúsculas. Por un lado, nos cuentan, el Ayuntamiento de manera extraña ha retrasado el cobro de este impuesto para evitar abucheos o feos por parte del público en la procesión del Corpus. Page no puede permitirse que se la monten en el Día Grande de Toledo, faltaría más.
La cosa tiene su miga y es extraña porque hasta este año el Ayuntamiento hacía coincidir los recibos del IBI y de la tasa de basura mientras que en esta ocasión se han empezado a recibir las cartas indicando el pago pero no se han cobrado aún. Del IBI no se sabe nada. Bueno, se sabe que tendrá un incremento del 10%, pero de su cobro nada.
Por otro lado, sigue latente en Toledo el caso de los huertos declarados urbanizables por el Plan de Ordenación Municipal (POM). Los pagos de estos IBI’s están arruinando a sus propietarios, casi 300 y muchos de ellos jubilados, y el Equipo de Gobierno lejos de buscar una solución ha planteado que puedan fraccionar en cuatro años el pago de los recibos de IBI de 2013. ¿Una medida justa para quien no puede pagar un impuesto que puede llegar a los 50.000 euros anuales? Una tirita para quien ha perdido un brazo y que además esconde unos intereses de hasta el cuatro por ciento. Ojo al dato y a este caso porque antes del verano habrá novedades.